Málaga, pese a su potencia económica dentro de la región, no está entre las provincias más exportadoras de Andalucía. En el ránking ocupa el sexto lugar, con el 7% del total de ventas únicamente y solo con Granada y Jaén por debajo.

Pese a que no es ni mucho menos una potencia, el tejido exportador malagueño está aguantando muy bien la pandemia. Sorprendentemente, en 2020 –con meses en los que el parón económico fue total– Málaga superó el registro de 2019 y situó la facturación exportadora en 2.287 millones de euros, un 1,93% más que el año anterior. 2021 va por el mismo camino. Entre enero y julio la provincia ha vendido en el exterior por valor de 1.391 millones, récord total en este periodo del año y un 5% más que el año anterior, según los datos del informe mensual de comercio exterior que publica el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y de Extenda, la agencia de promoción exterior de la Junta de Andalucía.

Málaga va, pues, camino de batir un nuevo récord exportador en 2021, como ocurrió en 2020. Mientras, el conjunto de la región andaluza llega entre enero y julio a los 19.701 millones de euros en ventas y se coloca por fin por encima del nivel de 2019, último año precrisis. Sin embargo, el crecimiento exportador autonómico en los siete primeros meses del año (+18,23% frente al bajón del 14,99% del año pasado) no es suficiente para llegar a los 19.738 millones de 2018, que marcan el récord absoluto en el periodo enero-julio y también en un año completo.

Málaga sí está en récord absoluto, y gracias a su gran resistencia durante la pandemia. Ello se debe, entre otras cosas, a que en la provincia no están tan presentes los sectores más castigados por la pandemia (que ahora son los que más rebotan) como refino de petróleo, minerales, productos químicos y aeronáutica, actividades además con un gran peso en el conjunto de las exportaciones regionales.

Frutos tropicales, carnes y bienes de equipo son las actividades que tienen más ventas

Eso hace que Málaga haya resistido bien en 2020 frente al hundimiento general y ahora crezca a un ritmo relativamente bajo en relación al conjunto de Andalucía, el 5,02%. Solo Sevilla, dentro de Andalucía, registra un menor incremento.En Málaga –que, recordemos, exporta poco en relación a su potencia económica– los dos motores exportadores son la alimentación y los bienes de equipo. El primero ocupa un peso relativo enorme: el 54,9% de lo que se destina a otros países desde Málaga son productos alimentarios. Son en total, 764 millones de euros, una cantidad importante en la cesta exportadora de Málaga pero escasa en relación al conjunto de las exportaciones agroalimentarias andaluzas. Las ventas en esta categoría se mantienen más o menos estables, con un mínimo descenso del 1,5%. Dentro de la alimentación, el rey es el aceite de oliva, con 219 millones, una cantidad prácticamente idéntica que la del año pasado; seguido de los frutos tropicales, que se venden por un valor de 198 millones de euros, frente a los 213 de enero-julio de 2020, y los productos cárnicos, que pasan de 160 a 163 millones de euros en enero-julio de 2021.

El siguiente apartado en importancia es el de los bienes de equipo. Este sí está creciendo con fuerza en los últimos años pese a la crisis. Así, la provincia vende por un valor de 223 millones en esta categoría entre enero y julio de este año, un 16% más que en 2020. Dentro de este apartado, lo que más se vende son los aparatos de precisión (66,8 millones) y los eléctricos (33,5 millones), además de equipos de oficinas y telecomunicaciones (44 millones de euros).

El tercer apartado potente dentro de Málaga, tras alimentación y bienes de equipo, es el de manufacturas de consumo y aquí destaca sobre todo textiles y confección, con 102,3 millones de euros en ventas entre enero y julio de 2021.

Quizás el punto más negativo, si se puede calificar así, es el de la balanza comercial. A diferencia del resto de Andalucía, Málaga tiene déficit de 99,1 millones de euros, debido a que las importaciones se sitúan en 1.490 millones (+21,8%), mucho más que las propias exportaciones. La tasa de cobertura (diferencia entre las ventas y las compras) está en el 93,2%. Andalucía, por ejemplo, registra un superávit de 2.421 millones (récord absoluto), con una tasa de cobertura del 114%, mientras que España tiene un déficit de 6.694 millones, con una tasa de cobertura pese a esa abultada cifra superior a la de la propia Málaga (96,25%).

Dentro del panorama nacional Málaga es una pequeña gota de agua. El conjunto del país vende al exterior por un valor de 186.523 millones de euros y los alrededor de 1.324 millones de la provincia malagueña representan apenas el 0,7% de esa cantidad.