Este martes, el buque de Trasmediterránea Ciudad Autónoma de Melilla que a diario cubre la ruta del mar de Alborán entre Málaga y Melilla ha tenido que adelantar de urgencia su habitual entrada debido a una muy especial emergencia sanitaria. Navegando desde el puerto melillense, entre las 02:00 y 03:00, un pasajero alarmó a la tripulación que su compañero de viaje se encontraba mal. Según ha podido saber Málaga Hoy, el pasajero enfermo había ingerido una serie de bellotas de hachís, habiéndose roto en el interior de su cuerpo una de las 50 que al parecer se había tragado.

Atendido por el personal sanitario del Melillero, tras valorarse la opción de regresar a la Ciudad Autónoma o dar aviso a Salvamento Marítimo para una posible evacuación, finalmente se decidía dar mayor velocidad al buque y adelantar así su llegada al puerto de Málaga.

Atracado a las 06:20, una ambulancia y dos coches de la Policía Nacional que esperaban a pie de muelle entraban en el garaje del ferry para cumplimentar el traslado del enfermo a un centro hospitalario.

Controlada la situación a bordo desde el mismo instante en el que se produjo la emergencia, además del personal sanitario del buque, los miembros de la brigada móvil de la Policía Nacional que viaja a bordo del barco han gestionado la incidencia sin que se haya producido ningún tipo de incidente.

A la espera de que se tramiten las diligencias pertinentes al respecto de este acto de tráfico de drogas, el ferry de Trasmediterránea ha salido con toda normalidad con destino a Melilla en su horario habitual tras vivir una alarmante circunstancia; un hecho que ya se había repetido hace unos meses, aunque en aquella ocasión, la urgencia por la rotura de una bellota de hachís se producía en el momento en el que este ferry estaba maniobrando para atracar en las aguas del puerto malagueño.