La policía cree que nadie intervino en la muerte del hombre en Marbella
La investigación apunta a que pudo sufrir un accidente o que se autolesionó y que salio de su casa a pedir auxilio
La Policía descarta que en la muerte del hombre de 32 años ayer en Marbella intervinieran terceras personas. La investigación apunta a que se produjo como consecuencia de un accidente o de una autolesión. Los hechos ocurrieron en la urbanización Alvarito Playa, que lleva su nombre, según informaron fuentes cercanas al caso, que precisaron que su padre, dueño de la citada parcela, está relacionado con el promotor José Ávila Rojas. Fueron distintas las llamadas de particulares que, pasadas las 18:15, alertaron al servicio de emergencias sanitarias 112 Andalucía de que había una persona herida en el suelo. El hallazgo tuvo lugar en el número 9 de la avenida Andasol del municipio marbellí.
La investigación apunta a que el hombre recibió una puñalada en la vivienda en la que residía y, a renglón seguido, salió hacia el exterior para pedir auxilio. Fue ya en la calle donde los vecinos se toparon con la trágica escena. Uno de los residentes de la zona subrayó en declaraciones a este periódico el retraso por parte de la ambulancia del 061, cuyos efectivos, a su llegada, trataron de reanimar a la víctima en varias ocasiones. Pese a los intentos por salvar su vida, los sanitarios solo pudieron certificar el fallecimiento.
Hasta el lugar acudieron también agentes del Cuerpo Nacional de Policía, que mantiene abierta una investigación para el esclarecimiento de los hechos. Tras personarse en la urbanización la comisión judicial, formada por el juez, el secretario y un médico forense, en torno a las 20:30 se procedió al levantamiento del cadáver, al que se le practicará la autopsia en el Instituto de Medicina Legal (IML). Se trata de la segunda muerte violenta ocurrida en las últimas semanas en Marbella. El pasado 16 de marzo, la Policía halló el cuerpo sin vida de un motorista que, según reveló posteriormente la prueba de los forenses, murió como consecuencia de un disparo en la cabeza en la zona conocida como Lomas de Río Verde. Un repartidor que pasaba por el lugar fue quien encontró el cuerpo sin vida de la víctima, llevaba un casco en el momento en el que recibió el impacto.
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