Juan Enrique Garrido Figueroa, trabajador del colegio San Estanislao de Kostka de Málaga, ha muerto tras sufrir un infarto este martes a las puertas del propio centro educativo, cuando a las ocho de la mañana llegaba para incorporarse a su puesto. Tenía 59 años y estaba a punto de cumplir 60 años.

El director del colegio, Alberto Rodríguez, ha afirmado que en el centro educativo están "destrozados" por la pérdida de un compañero "muy querido por todos" y muy vinculado al colegio.

Fue antiguo alumno y llevaba trabajando en el centro unos 35 años, prácticamente desde que acabó sus estudios, en el área de administración. También su padre trabajó en este colegio, donde una de sus hermanas es profesora de Primaria. Ahí estudiaron también sus tres hijos y están matriculados algunos de sus sobrinos.

Al subir las escaleras para entrar al colegio se desvaneció y perdió el conocimiento. Sus compañeros le practicaron las primeras maniobras de auxilio, antes de la llegada de los sanitarios, que trataron de reanimarlo sin éxito. Al parecer, "ha sido un infarto fulminante", según ha explicado el director del centro.