Operarios de la grúa renunciarán al plus por retirar más vehículos

Los operarios del servicio de apoyo a la movilidad, más comúnmente conocido como grúa, tienen previsto comunicar en los próximos días a la Sociedad Municipal de Aparcamientos (Smassa), de la que dependen, su decisión de renunciar al plus de productividad que pueden llegar a cobrar en función del número de vehículos que retiran de la vía pública por estar mal estacionados.

Así lo determinaron en una asamblea celebrada ayer por los empleados, en la que apoyaron la opción de desistir de este concepto, que puede alcanzar los 250 euros por mes si el trabajador es capaz de formalizar 130 enganches. El motivo, según expusieron a este periódico fuentes próximas a la decisión, no es otro que la mala imagen que se estaría dando a los vecinos afectados.

"Son cada vez más los trabajadores que reciben insultos y los problemas con los que nos encontramos cuando salimos a la calle", indicaron las fuentes consultadas, que fueron claras al señalar que ésta no es una situación adecuada para seguir actuando. Por ello, consideran que la eliminación del plus es una opción a llevar a cabo. "No queremos que la gente piense que somos como unos piratas que salimos a coger todos los coches que podemos", apuntaron.

En este sentido, relativizaron la importancia que esta productividad tiene en la nómina mensual de los trabajadores e indicaron que el operario que más cobró el pasado mes de febrero -el primero desde la puesta en funcionamiento de la grúa exprés- percibió unos 93 euros. A esto se une el que, según confirmó el pasado Pleno municipal el concejal de Aparcamientos y Seguridad, Antonio Cordero, la cifra de enganches ha bajado en ese mismo periodo.

El paso dado ahora por los trabajadores entra en contradicción con las peticiones que en su día realizaron en el marco de la negociación mantenida con la dirección de la empresa en el Sercla, foro en el que se dilucidó el enfrentamiento entre ambas partes con motivo de la implantación de la denominada grúa exprés, que posibilita a los operarios retirar vehículos sin la presencia de un agente de la Policía Local.

Esta circunstancia fue objeto de una importante polémica y del rechazo directo de los trabajadores, que se negaban a salir a la calle y actuar sin la compañía de un policía, aludiendo a la pérdida de seguridad. Este elemento fue corregido por parte del Ayuntamiento en la nueva Ordenanza de Movilidad, uno de cuyos artículos, el 45, destaca la posibilidad de "encomendar la vigilancia y disciplina del tráfico a agentes distintos de los de su policía local". "Dichos agentes realizarán la correspondiente denuncia, como particulares a las infracciones que observen, poniéndolo en conocimiento de los agentes de la Policía Local", añade el texto.

En este escenario, los sindicatos que participaron en la negociación aceptaron el nuevo sistema, que ahora piden corregir en cuanto a la percepción del plus económico. Por el contrario, los trabajadores insisten en la necesidad de que se concrete su categoría profesional, "dándonos algún tipo de autoridad".

El intento de normalizar el sistema de grúa exprés a través de la Ordenanza de Movilidad ha provocado la reacción por parte del Sindicato Independiente de Policía (Sip-An), que incluso ha recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) el mencionado artículo. Los responsables sindicales justificaron la decisión en la "usurpación" que a su entender supone esta medida sobre las competencias de los policías locales.