El PGOU ajusta el criterio para permitir la ejecución de viviendas en La Rosaleda

Las últimas subsanaciones impulsadas por la Junta de Andalucía sobre parte del contenido del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) de Málaga, vigente desde agosto de 2011, acotan de manera más que clara cualquier posibilidad de que los terrenos ahora ocupados por el estadio de fútbol de la Rosaleda pasen a albergar viviendas y espacios comerciales. La ficha contenida en el planeamiento de la capital hasta la fecha pasa ahora a ser corregida tras la publicación ayer en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) de las nuevas condiciones de actuación.

Si bien el documento anterior ya condicionaba una hipotética recalificación de la parcela a la construcción de un nuevo estadio, la actualización da una vuelta de tuerca en el sentido de exigir que la aprobación del instrumento de planeamiento que dé luz verde al cambio de uso del espacio, de deportivo a residencial, "no podrá aprobarse hasta la entrada en funcionamiento del nuevo equipamiento deportivo". Instalación para la que, conforme a los parámetros del propio PGOU, se dibuja en los terrenos de San Cayetano (127.000 metros cuadrados), en el entorno de Puerto de la Torre.

El contenido de la ficha anterior, a diferencia del ahora publicado por la Junta, relacionada la construcción del nuevo estadio con las opciones, finalmente diluidas, de que España organizase el mundial de fútbol en los años 2018 o 2022. Asimismo, fijaba "un plazo máximo de un año" para la adopción final del acuerdo sobre la necesidad del nuevo equipamiento y sobre la decisión final respecto a la calificación del terreno como Suelo Urbanizable no Consolidado o como Sistema General.

Los potenciales parámetros residenciales del suelo de La Rosaleda no sufren alteración, con la opción, en caso de cumplirse los condicionantes anteriores, de edificar 404 viviendas (283 libres y 121 protegidas), así como de disponer de 13.300 metros cuadrados de techo para usos terciarios, empresariales y comerciales. Para la parte residencial se propone su desarrollo en cuatro edificios de 15 metros, con una altura máxima de planta baja más 7.

El debate sobre la posibilidad de destinar la parcela del actual estadio a la construcción de pisos se puso sobre la mesa en la fase final de la redacción del Plan General, en julio de 2010. Y ello en un escenario en que la irrupción del actual propietario del club, Abdullah Al Thani, generó expectativas sobre su deseo de ejecutar una nuevo campo en las cercanías de Arraijanal, espacio donde quedará localizada la ciudad deportiva de la entidad.

El sector de La Rosaleda no es el único que se beneficia definitivamente del levantamiento de la suspensión acordada en su día por la Junta. En este listado cabe incluir el de Los Asperones, al que se restan unos 9.000 metros cuadrados de suelo de su delimitación, y sobre el que se obliga a que el desarrollo del sector tendrá que ser informado por la delegación territorial de la Consejería de Medio Ambiente por posible afección de la vía pecuaria Vereda de Pizarra a Málaga, al tiempo que se indica la necesidad de tener en cuenta las zonas de protección establecidas por el Reglamento de Policía Sanitaria Mortuoria.