Padres de Torremolinos demandan más plazas en el CEIP Mar Argentea

Han creado una plataforma de afectados y están dispuestos a tomar cartas en el asunto. Son padres de la zona del Pinillo, en Torremolinos, y demandan más plazas en el colegio público Mar Argentea. Aunque el centro se encuentra a 50 ó 100 metros de sus casas, muchos se quedarán sin una plaza. Aseguran que el centro nació pequeño para la densidad de nuevas urbanizaciones creadas en la zona y que, en sus primeros años, entraron niños de otras áreas mucho más alejadas, incluso del Arroyo de la Miel, y ahora los hermanos de éstos tienen preferencia con respecto a sus hijos. Ya han iniciado una campaña de recogida de firmas.

El colegio se construyó en 2007, "debido a la gran demanda de plazas solicitadas por el creciente número de familias que se han ido asentando en esta zona", dicen en la propia web del colegio. Sin embargo, se concibió como un centro de dos líneas, es decir, 50 plazas por curso. En 2011 se aumentó a un C3 (una clase más) aunque las obras de ampliación para hacer efectivo ese cambio en todos los niveles aún no se han iniciado. En el proceso de escolarización de este año se han recibido 112 solicitudes para las 75 plazas ofertadas, lo que supone que 37 niños de tres años se quedarán fuera.

Leticia Coronil es una de las madres afectadas. Junto a otros progenitores ha puesto en marcha una campaña de firmas por change.org, además de en guarderías y establecimientos de la zona y de un foro en internet. Han mantenido encuentros con la dirección del colegio, la inspección educativa y se van a reunir con la concejala de Educación del Ayuntamiento de Torremolinos. También enviarán una carta a la Delegación provincial. Juntos esperan hacer mayor presión para conseguir que los pequeños de la zona tengan su plaza.

"Tienen el terreno, el dinero, lo que hace falta es voluntad para hacer una ampliación en condiciones", considera Leticia y critica que "en vez de prever la demanda, se permitió que se matriculasen niños de todo Torremolinos, e incluso de otros municipios". La hija de Leticia, si no tiene la suerte de entrar en el sorteo, irá al CEIP Palma de Mallorca, "que me pilla a tres kilómetros de distancia y se necesita utilizar vehículo a diario, porque en mi urbanización no hay servicio de autobús, ni parada de tren, ni de taxi". Agrega esta madre que "muchos elegimos vivir aquí porque era una zona nueva, por la cercanía del colegio y del instituto y ahora nuestros hijos tendrán que escolarizarse a varios kilómetros". Para estos padres la solución no pasa "por poner un parche" y piensan que "no tiene ninguna lógica que la demanda tenga que ir a dónde está la oferta".