Paridad euro/dólar; causas y consecuencias
contenido patrocinado
El euro se encuentra en esos momentos más cerca de la paridad que nunca en las últimas décadas, un auténtico terremoto para la moneda de la eurozona, una divisa que llegó a cotizar por encima de los 1,5 dólares y que en el momento de esta escritura ya había bajado de los 1,01 dólares, una cifra que hace que el euro esté prácticamente en paridad con su homóloga estadounidense con todas las consecuencias que ello va a conllevar.
¿Hacia la recesión?
El dólar es la moneda que lubrica el comercio internacional de forma mayoritaria, no en vano tras los acuerdos de Bretton Woods se estableció que el dólar estadounidense sería la moneda de referencia internacional tras la guerra (los acuerdos se firmaron en verano de 1944, y aunque a la guerra en Europa aún le quedaba casi un año el final de la misma ya casi se podía palpar por aquellas fechas) para organismos como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial en un mundo que abandonaría el proteccionismo para cimentar la prosperidad de los pueblos en base al libre comercio. A cambio el dólar guardaría paridad con el oro mediante el famoso patrón oro, de esta forma cualquier poseedor de dólares tendría derecho a reclamar cierta cantidad de oro, asegurando que los EEUU no podrían imprimir más allá de lo que pudieran respaldar con sus reservas de oro, patrón al que Richard Nixon dió carpetazo en el 1971, en una medida que sin embargo no terminó ni mucho menos con la preponderancia del dólar a nivel de comercio internacional, sobre todo si se habla de materias primas energéticas, lo cual ayuda en parte a explicar el peligro para la economía europea que perciben ciertos analistas.
Y es que las variaciones de una divisa con respecto a otra no se utilizan solamente para especular con trading de forex en Plus500 u otros brókeres online, con los riesgos que ello implica, o como indicadores de la prosperidad de un país con respecto a otro (por reduccionista que sea hacer esto), sino que tienen un impacto muy real en la economía del día a día, el día a día de quienes tienen que llenar el depósito de gasolina o el carrito de la compra, algo cada vez más oneroso debido en parte a la necesidad de cambiar un euro cada vez menos valioso para comprar un dólar cada vez más caro para después adquirir petróleo o gas a según qué proveedores que pudieran preferir la moneda estadounidense a la europea, una situación que no se dió durante la anterior crisis, durante la cual el euro era mucho más valioso que el dólar y por lo tanto se podía comprar energía barata, a la vez que los estados del Sur de la eurozona tenían una deuda pública muchísimo menor.
A la vuelta de las vacaciones
Y es que tras el paréntesis que parece estar suponiendo el verano (paréntesis por los buenos datos de empleo dada la importancia del turismo en España, y paréntesis mental para una ciudadanía que ya acusa demasiado tiempo acumulando situaciones de gran estrés), la situación no habrá mejorado, como ya predicen cada vez más voces, con una inflación general y un precio de la gasolina en particular, que continuarán en los niveles actuales o, probablemente, mayores.
Con el coronavirus golpeando con nuevas olas, pero relegado a un segundo plano informativo por la actualidad geopolítica y sobre todo económica, parece que los españoles tendrán que afrontar durante los próximos meses problemas como el encarecimiento de las letras de la hipoteca, tanto en las variables ya contratadas como en las de tipos fijos por contratar, dado que el euribor, tipo europeo de oferta interbancaria, está subiendo y este indicador se utiliza para calcular los tipos de las hipotecas mixtas y variables, y en caso de subir o bajar también influirá incluso en las de tipo fijo, algo que ya se avisa por algunos economistas, que dicen que el tiempo de encontrar una hipoteca de tipo fijo barata o bien se está acabando o bien ya ha terminado.
Por último queda por comprobar cómo va a afectar todo esto a la prima de riesgo, concepto al que los españoles se acostumbraron durante la crisis del 2008 pero que se olvidó cuando el BCE comenzó su programa de compra de deuda soberana, algo que está a punto de terminar.
También te puede interesar
Lo último
Contenido ofrecido por SO/Sotogrande Spa & Golf Resort
Contenido Patrocinado
Contenido ofrecido por Restalia