Conducía por la barriada de La Palmilla a una velocidad anormalmente reducida, siguiendo las indicaciones de su GPS, y llamó la atención de los agentes del Grupo de Investigación y Protección (GIP) de la Policía Local de Málaga, que comenzaron a seguirlo. Al inspeccionar el coche, los policías encontraron dentro de dos bolsas más de 300.000 euros en efectivo. El hombre, de nacionalidad alemana y 57 años, acabó en las dependencias policiales.

Los hechos tuvieron lugar por la tarde, cuando los policías locales, que prestaban servicio de paisano y en vehículo camuflado patrullando por la barriada de La Palmilla, decidieron seguir a un conductor que circulaba en un vehículo con matrícula alemana a velocidad anormalmente reducida, siguiendo las instrucciones de un dispositivo GPS.

Una vez estacionó el vehículo, los policías locales se apearon del suyo identificándose a través de sus placas emblemas y carnés profesionales, comprobando cómo el conductor respondió con nerviosismo e intentando ocultar un teléfono móvil, por lo que procedieron a identificarlo y a llevarle a cabo un cacheo preventivo de seguridad, a la vez que le intervenían las llaves del turismo para evitar que pudiera marcharse del lugar.

Acto seguido, los agentes del GIP de la Policía Local de Málaga procedieron a inspeccionar el vehículo, localizando en los asientos traseros dos bolsas llenas de billetes de diverso valor, comprobando posteriormente, tras efectuar un recuento exhaustivo realizado con máquina contadora en dependencias policiales que sumaban la cantidad exacta de 304.120 euros.

Hasta el lugar se desplazaron en apoyo unidades de zona de la Policía Local de Málaga y otras unidades del GIP y del Grupo Operativo de Apoyo (GOA) del citado cuerpo policial, así como agentes de la Policía Nacional.

El individuo fue trasladado a dependencias policiales, donde fue plenamente identificado, llevándose a cabo el recuento del dinero, no poseyendo documento alguno que justificase tal importe, que superaba con creces el límite permitido en base a la Ley 10/2010, de 28 de abril, de prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo, que obliga a declarar movimientos por territorio nacional de medios de pago por importe igual o superior a 100.000 euros o su contravalor en moneda extranjera, por lo que se procedió a la intervención del mismo, entregando tanto copia del acta como el vehículo al encartado.