La Policía Nacional continúa investigando la desaparición de Sibora Gagani, la mujer de origen albanés y nacionalidad italiana, hace ya nueve años. De momento, los agentes no descartan ninguna hipótesis y todas las  pesquisas posibles se llevarán a cabo, ha informado este jueves el subdelegado del Gobierno en Málaga, Javier Salas, que también ha reconocido que las sospechas siempre han estado centradas en su última pareja, Marco R, ahora detenido por su presunta autoría en el crimen de Paula, con la que también había mantenido una relación sentimental. 

Tras ser arrestado como presunto autor de la muerte a puñaladas de su expareja, de 28 años, en el domicilio que ambos todavía compartían en la zona de La Carihuela (Torremolinos), se negó a declarar ante la Policía por el caso de Sibora. Los agentes decidieron entonces trasladarlo ante el juez pero al ver una imagen de la desaparecida en un tablón, en dependencias policiales, aseguró haberla matado y, después, emparedarla. 

El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, explicó este miércoles que estas declaraciones las hizo "de forma espontánea, sin la presencia de su abogado ni la autoridad judicial" y que, posteriormente, cuando ya estaba su letrado, se retractó. De esta manera, tras la primera confesión -aunque no fuera de manera oficial-, la Policía realizó una entrada y registro de la vivienda del investigado en la que no localizaron  el cuerpo. Al parecer, Marco también manifestó que habría utilizado ácido para hacer desaparecer el cuerpo de Sibora. Por ello, la Policía volvió a realizar una nueva entrada y registro al domicilio, con la autorización judicial correspondiente, para comprobar si había presencia de algún resto químico que ayude a esclarecer lo sucedido.  Pero, tampoco hubo suerte. 

"Se han registrado viviendas, se han tomado muestras y todas las vías están abiertas, pero hasta la fecha no hay datos que corroboren lo que ha podido aportar el presunto asesino", ha lamentado el subdelegado del Gobierno de Málaga. Sin embargo, ha defendido que los agentes han de investigar "todo lo que el el individuo declara por si hubiera algo de vedad en ello". "En cuanto alguna vía dé resultados positivos se enfocará por ahí la investigación", ha añadido. 

Salas también ha recordado que hace nueve años, cuando la familia de Sibora denunció su desaparición en Italia, ya se investigó a Marco y "no se encontraron pruebas que lo incriminaran". Pero, tras el asesinato de Paula a manos presuntamente del mismo hombre ha considerado evidente que se reabra el caso y se siga investigando "por si ahora pudieran aparecer más pruebas a través de sus declaraciones o de las nuevas analíticas que se hagan". Pero, hasta la fecha, insiste en que "no se ha encontrado nada". "Esperemos que se encuentre y que podamos anunciarlos", ha deseado.