Postigo de Arance y Atarazanas, próximos puntos acotados al tráfico

El área de Movilidad del Ayuntamiento de Málaga no quiere que el sistema de restricción de acceso de vehículos se acote, exclusivamente, a la almendra del centro histórico, donde los dispositivos llevan funcionando algo más de tres semanas. El equipo de gobierno del PP proyecta ampliar y extender este tipo de controles, que limita el paso por ciertas calles a aquellos coches con permiso para ello, a partir del próximo año a la calle Postigo de Arance, en una primera etapa, y el entorno del mercado de Atarazanas, en una segunda fase.

Así lo expuso a este periódico el concejal de Movilidad, Juan Ramón Casero, quien se mostró satisfecho con el funcionamiento de los bolardos retráctiles implantados hasta el momento, al tiempo que confió en que una vez pasado un plazo de tiempo razonable habrán de ser extendidos a otras zonas del centro. Preguntado por los pasos futuros, el edil del PP fue claro: "La idea es ampliarlo poco a poco a Postigo de Arance, más aún cuando se están finalizando las obras de la Catedral", comentó, al tiempo que justificó el desarrollo de esta iniciativa en la necesidad de proteger el monumento. Este punto de control de acceso, sumado al ya existente en la calle Císter, permitiría liberar de tráfico a todo el entorno del templo. "La permanencia constante de tráfico y autobuses emanando gases todo el día junto a la Catedral no tiene mucho sentido", agregó.

Éste es el peldaño más inmediato que tiene previsto ascender el Ayuntamiento en este programa de movilidad sostenible, aunque previsiblemente no se lleve a cabo dentro del actual ejercicio. "Hay que tener en cuenta que esta medida incluye más cosas que sólo impedir el tráfico, ya que hay que reubicar las paradas de autobuses y de coches de caballos que hay en Postigo de Arance", dijo Casero, que defendió la posibilidad de trasladar el estacionamiento de autobuses a la parte trasera de la Casona del Parque, una medida compleja por cuanto es uno de los pocos espacios en los que se permite el aparcamiento.

A medio plazo, la mirada de los técnicos municipales está puesta en limitar el paso de vehículos en las vías aledañas al mercado de Atarazanas, en estos momentos objeto de obras de restauración. Esta intervención tendría por objeto el unir el actual itinerario de Sancha de Lara y Martínez con Puerta del Mar, Atarazanas y la Plaza de Arriola, con lo que Pasillo de Santa Isabel se convertiría en la circunvalación del casco antiguo.

Por estas zonas únicamente podrían circular aquellos coches con autorización para ello, ya sea porque son residentes, disponen de plaza de aparcamiento o son profesionales de la carga y descarga. Asimismo, el permiso acoge también a los vehículos de emergencias y servicios municipales, taxis y personas con movilidad reducida. El plan municipal garantiza, asimismo, el paso de motos y ciclomotores en todo momento.

En cuanto al funcionamiento de los dispositivos de control de accesos al centro, el edil del PP dijo que ha funcionado mejor de lo que se esperaba, contabilizándose escasos incidentes en lo que a los aparatos se refiere. "Se ha tenido que cambiar una óptica en Císter y ha habido algún problema con el servidor central", dijo a modo de resumen. Incluso, parece que algún conductor ha querido en este intervalo de tiempo probar la dureza de una de las pilonas, confiando en poder salir de la zona sin que la misma fuese bajada.