El clítoris es un pene sin desarrollar. Cuando la mujer tiene un déficit de una enzima, sufre un exceso de hormonas masculinas y se desarrolla más de lo normal. Habitualmente, esta anomalía pasa desapercibida en la infancia, pero se manifiesta en la pubertad.

En estos casos, chicas de entre 13 y 15 años pueden desarrollar un clítoris de hasta cinco centímetros que incluso sufren erecciones. Una ambigüedad en los genitales femeninos que ocasiona problemas estéticos, psicológicos y físicos.

De ahí la importancia de hacer una cirugía genital reconstructiva. Los cirujanos plásticos del Hospital Carlos Haya utilizan una técnica para corregir esta hipertrofia del clítoris. En los últimos tres años, los especialistas han intervenido ya a seis pacientes con resultados estéticos y funcionales "totalmente satisfactorios".

Un residente que estudia en el hospital malagueño para ser cirujano plástico, Javier Collado, recogió estas experiencias quirúrgicas en una comunicación. La presentó en el último congreso de la Sociedad Andaluza de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (Sacpre) recientemente celebrado en Sevilla y se llevó el premio en la categoría MIR.

La experiencia quirúrgica de los cirujanos plásticos del Carlos Haya en las operaciones de reasignación de género (cambio de sexo) ha sido clave para implantar la técnica que permite conservar la función de estimulación sexual del clítoris. Una de las complicaciones más graves es la necrosis, lo que dejaría a la paciente sin sensibilidad erógena, igual que si hubiera sido sometida a una ablación. Pero la técnica reduce esas complicaciones.

La trayectoria del hospital -que fue el primero en ofrecer el cambio de sexo en la sanidad pública española- lo ha convertido en un centro referente nacional para esta hipertrofia ya que al ser casos raros no hay muchos especialistas que sepan abordarlos. Collado, un inminente cirujano plástico, supo plasmar todo ese trabajo en una comunicación y por ello ha sido reconocido por sus colegas.