Proponen indemnización de 5.000 euros por sacar los 38 dientes sin consentimiento
Los cirujanos tomaron la decisión en quirófano y no volvieron a pedir la aprobación
El Consejo Consultivo de Andalucía propone una indemnización de 5.000 euros por daño moral a una paciente con discapacidad psíquica que entró en quirófano en el Hospital Civil "para realizarle extracción de molar y limpieza dental" y a la que le extrajeron las 38 piezas dentales sin ampliar el consentimiento inicial que había dado su madre para la intervención. El pronunciamiento de la institución consultiva refleja que se trataba de una enferma con una discapacidad intelectual del 75% que según los informes médicos "no abre la boca" por lo que sería "cuando el paciente esté anestesiado cuando se podrá determinar con exactitud los procedimientos específicos a realizar".
La paciente fue derivada desde el Área Sanitaria Serranía de Ronda a la Unidad de Maxilofacial del Civil. La operación se practicó el 29 de enero de 2009. Según precisa el Consejo, el expediente de la paciente justifica la decisión de extraer todas las piezas dentales en que tenía una periodontitis -enfermedad comúnmente conocida como piorrea- que provoca la pérdida del hueso de la encía. Debido a que la enferma no abría la boca, el diagnóstico se hizo estando la paciente en el quirófano bajo anestesia general.
"El consentimiento prestado en tales términos de incertidumbre no justificaba que se prescindiera de volver a recabarlo para la extracción de la totalidad de las piezas dentales", estima el Consejo incluso cuando la extracción de la totalidad de las piezas dentales fuera el tratamiento indicado y el objetivo de los cirujanos fuera evitar nuevas anestesias generales.
El órgano consultivo rechaza la petición de una indemnización de 314.000 euros que reclamaba la madre por "desorbitada", pero estima procedente una compensación de 5.000 euros por el daño moral ocasionado.
El Consejo apunta que los informes médicos reconocen que la decisión de extraer todas las piezas dentales no fue consultada con los familiares, pese a que en la sala de espera estaban la madre, el padre, dos tías, dos tíos, una hermana y seis primos de la paciente. Por ello y dado que la operación se prolongó durante "varias horas", el órgano consultivo sostiene que "no aparece justificada la decisión de no solicitar una ampliación del consentimiento". Para el Consejo, ese defecto en el consentimiento "es en sí mismo considera una infracción de la lex artis generadora de un daño indemnizable".
También te puede interesar
Contenido patrocinado por Cibervoluntarios
CONTENIDO OFRECIDO POR AMAZON