El Puerto de Málaga pone fin al bloqueo de la marina deportiva que se construirá en la zona de San Andrés y que lleva un año paralizada por el recurso administrativo que presentó una de las empresas licitadoras. El presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio, ha asegurado que el próximo 14 de febrero tendrá lugar un consejo de administración en el que se otorgará la concesión a Marina San SL, la sociedad creada por el fondo catarí Al Alfila, que también promueve la torre en el Dique de Levante del Puerto de Málaga.

Este consejo se celebrará después de que se hayan rechazado las medidas cautelares solicitadas por una de las empresas que estaba interesada en llevar a cabo la construcción de este nuevo puerto deportivo en Málaga. El próximo martes 14 de febrero se otorga la concesión y en ese momento el fondo catarí “podrá comenzar a diseñar el proyecto de construcción y la obra”, después de conseguir todos los permisos necesarios, según Rubio. El presidente de la Autoridad Portuaria, no obstante, desconoce las fechas exactas de cuándo comenzarán las obras, ya que todo depende del tiempo que tarden en concederles las licencias necesarias y “de los estudios que tengan que realizar”. 

La nueva marina ocupará un espacio de más de 100.000 metros cuadrados en la zona oeste del puerto de Málaga, en la margen derecha del río Guadalmedina, con capacidad para 566 embarcaciones de recreo entre 8 y 30 metros de eslora (se precisa que deberán permitir hasta 50 metros de eslora). A cambio de la inversión necesaria, el futuro concesionario dispondrá de un periodo de explotación de 50 años. Se estima que el impacto socioeconómico total, durante el periodo concesional, será de unos 785,9 millones de euros (unos 15,7 millones de euros al año).

En cuanto a empleos, se estima un mínimo de 700 puestos de trabajos indirectos y directos, sin tener en cuenta la mano de obra necesaria para efectuar la obra. De estos, se crearán 70 puestos directos, un empleo indirecto de 590 trabajadores y un empleo inducido de otros 741.