El camino que iniciaron en abril de 2004 el Ayuntamiento de Málaga y el Puerto Portuaria para la ejecución, primero, y, cesión, segundo, de un edificio para uso cultural en la esquina de los muelles 1 y 2 está apunto de concluir. Mañana, de no mediar sorpresa de última hora, está previsto que sea objeto de análisis y aprobación del Consejo de la Autoridad Portuaria el pliego de condiciones definitivo que servirá de guía a la concesión administrativa del inmueble en favor del Consistorio por un periodo de 35 años. Uno de los detalles que hasta última hora está siendo objeto de negociación es el relacionado con el canon al que ha de hacer frente la Corporación local por la ocupación del espacio portuario y que se da por seguro superará los 315.815 euros inicialmente previstos.

El incremento respecto a esta cifra de partida se produce tras conocerse las conclusiones del estudio de tasación elaborado por Segipsa sobre el edificio cultura. La cifra, no obstante, es la mitad del valor real de las mencionadas tasas de ocupación, dado que se aplica una bonificación conforme a lo dispuesto en el artículo 181, c. de la Ley de Puertos. Este precepto dice: "Cuando el titular de la concesión o autorización sea un órgano o entidad de las Administraciones públicas y el objeto de las mismas sean actividades de interés social o cultural: el importe de esta bonificación será del 50% de la cuota correspondiente a la tasa".

El peso de esta carga para las arcas municipales, tomando como referencia la totalidad de la concesión, estará por encima de los 11 millones de euros. No obstante, en la adenda al acuerdo original suscrito el pasado mes de abril por el alcalde, Francisco de la Torre, y el presidente del Puerto, Paulino Plata, se incluye la posibilidad de compensar esta consignación mediante la deuda tributaria que hasta la fecha tiene contraída el Puerto en materia, fundamentalmente, del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).

Una vez alcanzado el acuerdo por parte del consejo de administración se pondrá fin a un proceso más que convulso en los últimos meses. En especial desde el momento en que el Ayuntamiento tomó la decisión de forma unilateral de ocupar sin autorización alguna el edificio del Cubo para iniciar los trabajos de adecuación del futuro Pompidou. La irregularidad se mantuvo durante 17 días, incluso a pesar de la petición formal parte del Puerto para que se parasen las obras y de la existencia de un informe de la Abogacía del Estado subrayaron la ilegalidad ocurrida.

No fue hasta el 20 de agosto cuando el Consejo de la Autoridad Portuaria ordenó la paralización de la obra. El acuerdo, además, limitaba al acopio de materiales y actuaciones menores las tareas permitidas por un periodo de tres meses, pero ello condicionado a que antes el edificio fuese recepcionado por el Puerto, un extremo que no se cumplió hasta el 5 de septiembre. Sin embargo, las actuaciones que se vienen materializando desde hace semanas exceden el acuerdo del consejo del Puerto, circunstancia que ha motivado la elaboración de un informe que será expuesto este viernes, según indicaron fuentes de la institución.

La previsión que maneja la Gerencia de Urbanismo es que la actuación sobre este inmueble esté culminada para el 23 de enero próximo. La inauguración se materializaría a lo largo del mes de marzo, aún sin fecha cerrada.