El puente metálico para el ferrocarril existente dentro del Puerto de Málaga y que salva el río Guadalmedina moverá su posición actual. La infraestructura, una de las más características del recinto, se trasladará para eliminar la curva existente actualmente en las vías del tren e invadir menos espacio del Paseo Marítimo Antonio Banderas. El objetivo es disminuir la afección al tráfico, que ya es cortado diariamente en varias ocasiones para permitir el paso de los trenes de mercancías que salen y entran del Puerto.

"Esta actuación ya está incluida en el proyecto presentado para el Plan Especial del Puerto", recordó el presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Linde, que asegura que la opción se ejecutará "para que las vías ferroviarias no entren tanto en la acera del Paseo Marítimo y transcurran en un mayor tramo por el interior del recinto".

Mientras, el Paseo Marítimo y las calles Ayala y Héroe Sostoa seguirán siendo cortadas continuamente durante 2008. De hecho, lo serán durante dos horas cada día. Según las previsiones portuarias, este año moverán alrededor de 800.000 toneladas de mercancías por ferrocarril, lo que supondrá el movimiento de unos 20 trenes diarios. Y los cortes, en su conjunto, tendrán una duración de 120 minutos.

Mientras tanto, el acuerdo con el Ministerio de Fomento para el soterramiento de las vías del tren desde la estación María Zambrano hasta el Puerto, valorado en unos 17,5 millones de euros, sigue sin convertirse en realidad, tal y como demanda la Autoridad Portuaria.

La entrada al Puerto se hace desde ayer desde Alameda de Colón, ya que la de San Andrés está cerrada por distintas obras.