Quejas de padres de Gamarra por los acosos de un alumno conflictivo

Apenas quedan unas semanas para que termine el curso escolar, pero la preocupación de algunos padres de alumnos de quinto de Primaria del colegio Gamarra les reunió ayer en el centro para quejarse ante la dirección y buscar soluciones a un problema surgido en los últimos días con un alumno conflictivo, de 11 años de edad, que supuestamente acosa a sus hijos. El agresor intentó acosar a un compañero dentro de un cuarto de baño y éste se encuentra en tratamiento psicológico, según informa su progenitora. Otros padres, con los que ayer se entrevistó este periódico, aseguran que han "prohibido" a sus hijas que acudan solas al baño. "Están empezando a desarrollarse y las persigue", dicen preocupados.

La dirección del centro ha abierto un parte disciplinario al niño y lo ha cambiado de clase, según dictamina el protocolo de la Junta de Andalucía ante posibles casos de acosos. Sus padres también han sido informados para que se impliquen en el posible problema y el niño acude por las tardes a un aula de convivencia como castigo. Durante las horas lectivas, los profesores no le pierden de vista para que los supuestos sucesos no se repitan.

Pero la preocupación existe. Los padres narran peleas anteriores por el supuesto perfil conflictivo de la víctima, pero el episodio del cuarto de baño ha colmado su paciencia. Y también sus nervios. Una decena de padres se presentaron ayer en el colegio Gamarra y el próximo jueves irán a la Delegación de Educación en Málaga para pedir soluciones. "No es una ninguna broma, ni un juego de niños, podemos estar ante un problema serio y nos preocupan nuestros hijos", explicaron ayer en la puerta del propio colegio, en Nueva Málaga.

La madre del menor acosado en el cuarto de baño, de 10 años, dice que en la reunión mantenida ayer con la dirección, les han explicado que el colegio ha actuado según el protocolo para estos casos, pero considera que ésto no es garantía de que los hechos pudieran repetirse, por lo que pide la intervención de la Delegación de Educación. "El jueves nos entrevistaremos con el inspector de la zona", arguye la citada madre. Afirma que ha llevado a su hijo para que lo vea su pediatra y al Materno, y que no tiene daños. "Estoy pendiente de la valoración del psicólogo", añade. Este periódico también contactó ayer con el centro pero prefirieron no pronunciarse. Los padres de varias niñas dicen que sus hijas tienen miedo, por ello quieren soluciones definitivas aunque resten pocos días para el final del curso.