Rachid, el héroe
Un oficial de la Policía Nacional de Melilla retiene al conductor e impide que la muchedumbre le agreda


El héroe de ayer tiene nombre propio: Rachid. Es un oficial de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional de Melilla, pero ayer era un transeúnte más de la calle Larios. Había llegado a Málaga hacía poco para someterse a una revisión médica tras ser operado en un hospital de esta ciudad de una hernia inguinal. El agente se encontraba de baja laboral por enfermedad.
Él fue una de las primeras personas que acudió a socorrer a Asumpta Mastroniani, la primera mujer atropellada por el ex agente de la Guardia Civil. Estaba junto a José María, el camarero de Lepanto, atendiendo a la herida cuanto tuvo que arrastrarla hacia la pared para impedir que el automóvil volviera a arrollarla cuando trataba de huir en dirección a la plaza de La Marina.
También fue Rachid quien, ya parado el vehículo, impidió que el conductor se diera a la huida y le arrebató las llaves del vehículo. Es más, a él se debe que la muchedumbre que acorralaba el coche no agrediera al conductor. Se identificó como Policía Nacional, se aseguró de que el sospechoso no podría salir por la puerta del piloto y erguido desde el asiento del copiloto trataba de mantener la calma, aunque no siempre pudo impedir que la multitud de personas que rodeaban el automóvil se acercaran para darle patadas y puñetazos a la carrocería mientras increpaban al guardia civil jubilado que aguardaba en el interior.
Rachid previsiblemente tuvo que echar mano de su experiencia y desplegar todo el conocimiento recabado en la Unidad de Protección y Reacción (UPR) de la Brigada de Seguridad Ciudadana de Melilla en la que ahora está destinado para controlar la situación. Este equipo policial es el que se encarga de impedir que haya incidentes en espectáculos de asistencia masiva como los partidos de fútbol o las corridas de toros. También es una unidad experta en intervenir en altercados públicos.
Este oficial de la Policía Nacional, del que las fuentes consultadas no han proporcionado los apellidos, tiene unos 30 años. Es un joven moreno, de pelo rizado y complexión atlética. Uno de sus primeros destinos en la Policía Nacional estuvo en Madrid y después regresó a Melilla, donde siempre ha estado destinado en la Brigada de Seguridad Ciudadana. Primero en los coches zeta o patrulleros del 091 y después en la Unidad de Protección y Reacción.
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