El Tribunal Supremo ha rebajado en dos años de cárcel la pena impuesta por la Audiencia Provincial de Málaga a un hombre que fue sorprendido en 2004 por la Policía vendiendo droga que escondía bajo la dentadura postiza, que finalmente ha sido condenado a un año y medio de prisión. El alto tribunal estima uno de los motivos del recurso de casación y aplica un tipo atenuado del delito contra la salud pública al tener en cuenta la "escasa cantidad" de la droga aprehendida, hasta el punto de que la sustancia "no ha podido ser analizada" para determinar su pureza.

En los fundamentos de derecho se resalta además la condición de adicto del recurrente, puesto que aunque no resulta acreditada una adicción grave, sí su sumisión a un tratamiento de desintoxicación con metadona que sugiere una adicción anterior, que puede coincidir con el momento de los hechos. "Ello sugiere -argumenta- la existencia de una funcionalidad de la droga en la comisión de un delito, como el tráfico a pequeña escala, en la que el recurrente trafica para subvenir a sus necesidades de droga".

El hombre fue sorprendido sobre las 20:10 horas del 18 de febrero de 2004 en la calle Cigüela de la capital malagueña cuando, después de recibir dinero de otro individuo, sacó dos bolsitas de debajo de la dentadura postiza y se disponía a entregarlas. Al percatarse de la presencia policial, tiró al suelo los dos bolsitas, que fueron recuperadas por los agentes y contenían una mezcla de cocaína y heroína con un peso de 0,17 gramos. El acusado, que fue condenado por la Audiencia de Málaga a tres años y medio de prisión, llevaba en el momento de su detención 75 euros en billetes de cinco y diez euros.