Ruiz Povedano destaca la conducta imparcial de Mata y su lucha contra la corrupción

URBANISMO

El ex director gerente de la Oficina de Planeamiento Urbanístico de Marbella ha manifestado su confianza sobre la ex delegada de Vivienda y Ordenación del Territorio ya que "no queda duda alguna de su conducta honorable y de su honradez" durante su trabajo para la Junta

El ex director gerente de la Oficina de Planeamiento Urbanístico de Marbella (Málaga) José María Ruiz Povedano ha destacado hoy la "conducta imparcial" y la lucha contra la corrupción urbanística de la ex delegada de Vivienda y Ordenación del Territorio María José Mata, a la que se relacionó con Malaya.

En un comunicado remitido a Efe, Ruiz Povedano ha manifestado su confianza sobre Mata, ya que "no queda duda alguna de su conducta honorable y de su honradez" durante su trabajo para la Junta de Andalucía.

Mata, que rechazó su cargo al trascender un informe policial que indica que montó una empresa con un abogado investigado en la "Operación Malaya", mantuvo una conducta como inspectora "de exigencia con todos los gobiernos municipales y alcaldes de la provincia ante las numerosísimas infracciones y la ausencia de disciplina urbanística", ha señalado en el escrito Ruiz Povedano.

Asimismo, ha explicado que no existe la comisión de ninguna ilegalidad por parte de Mata y que "ni siquiera está sujeta a imputación ni investigación judicial".

Para Ruiz Povedano es "paradójico" que se relacione con el caso Malaya a la que ha sido una de las personas "que más ha actuado contra la corrupción urbanística de Marbella".

Además, ha asegurado que Mata no demandó el cargo, sino que fue el propio consejero de Vivienda, Juan Espadas, el que se lo ofreció por "su idoneidad, capacidad, lealtad y colaboración" con las distintas administraciones del gobierno andaluz.

Ha manifestado que "no se le puede derivar la responsabilidad de un tercero" y menos crear "juicios paralelos" que pueden conllevar un daño personal a esta persona.

El también ex delegado de Obras Públicas ha hecho referencia al uso de la razón y de una actitud ética en el tratamiento de la información porque se corre el riesgo de "dar una imagen falsa de una persona, de viciar la trayectoria profesional de una empleada pública ejemplar y de provocar un daño irreparable a ella y a su familia".