Saborear de nuevo esos bocados memorables

Conchas finas gratinadas, los pinchitos de Yudi; buchoncitos y soldaditos de Pavía, guarritos, caldillo de pintarroja, caracoles, callos, pipirrana de gambas, hormigón, andresitos o jamón dulce. La boca se hace agua para los que guardan en el recuerdo los sabores de estos platos en pequeñas dosis, bocados tradicionales que se hacen muy presentes a partir de hoy. Hasta el 13 de noviembre, Cerveza Victoria ofrece un recorrido por 26 de las tapas clásicas malagueñas más recordadas de la mano de bares y restaurantes. Se trata de un guiño a la memoria sentimental de la ciudad, donde se rescatan guisos reconfortantes, bocados sencillos

pero cargados de sabor y el recuerdo de algunos locales ya desaparecidos que fueron un referente en las rutas de tapeo a lo largo de todo el siglo XX.

Durante diez días estas tapas se podrán disfrutar junto a un quinto de Victoria por 2,5 euros. Además, cada establecimiento ofrecerá una ficha coleccionable con la receta y una breve reseña del bar que lo hizo popular. Para poner en marcha este evento, Cerveza Victoria, de la mano del Club Gastronómico Kilómetro Cero y Doctor Watson, ha realizado una labor de documentación en la que se ha consultado a más de 200 personas de distintas edades acerca de las tapas más recordadas y los bares donde se hacían. Asimismo, cocineros, antiguos propietarios y clientes habituales de aquellos locales han colaborado para tratar de recuperar las recetas originales y reproducir los platos con una visión actual pero fiel al plato original.

Así volverán a ser protagonistas tras las barras algunas de las tapas más recordadas de lugares como La Alegría, el Bar Pombo, El Boquerón de Plata, Casa Matías, La Mar Serena, La Buena Sombra, La Cancela, la Cafetería Viena, el Bar Regio, La Marina, Los Faroles o La Tasca. En total, 23 establecimientos ya desaparecidos, junto otros que aún permanecen abiertos y que rendirán homenaje a sus comienzos y a su esencia, como el Café Central, El Pimpi o Los Hidalgos.