Los trabajadores del centro Indra en Málaga, ubicado en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), volverán a concentrarse este miércoles, 21 de mayo, para protestar por las nuevas condiciones laborales que la patronal AEC y Aneimo propone en las negociaciones mantenidas para renovar el convenio del sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), y que, según han afirmado, son "cercanas a la desregulación".

Se trata de unas protestas que se están realizando a nivel nacional en otras sedes de Indra, como Madrid, Valencia, Badajoz, A Coruña y Sevilla, así como en distintas empresas de las TIC, con el fin de "reclamar unas condiciones dignas en un sector regularizado".

Según explicó el comité de empresa de Indra, Rafael Sánchez, de Comisiones Obreras (CCOO), no es un problema que afecte únicamente a Indra, sino en el que están implicadas todas las empresas del sector tecnológico, ya que el convenio está prorrogado desde 2009 y "no ha habido avances", por lo que "las tablas salariales y las condiciones están congeladas desde entonces". Así, subrayó que entre las pretensiones de la empresa lo que más preocupa a los trabajadores es la nueva distribución de la jornada laboral y el sistema de clasificación profesional.

En cuanto al primer punto, Sánchez señaló que las empresas quieren aumentar la jornada laboral hasta 10 horas diarias y ampliar al 15% la jornada irregular. "Nos choca que ahora, cuando parece que hay declaraciones de intenciones pensando en la conciliación familiar y en adelantar los horarios, propongan alargarnos más la jornada", afirmó el presidente, agregando que esto "va contra corriente". Respecto a la clasificación profesional, los trabajadores reconocen que "tenemos categorías obsoletas" y que "hay acuerdo en cuanto a que hay que actualizarlas", pero Sánchez precisó que lo que la patronal pretende es establecer "un número limitado de niveles salariales y englobar en ellos a casi todos los trabajadores".