El Tribunal Supremo eleva la cárcel a un maltratador que dejó hemipléjica a una mujer
Estima que no fue un intento de homicidio, sino de asesinato y le impone 11 años de reclusión
El Tribunal Supremo ha elevado de ocho a 11 años de reclusión la condena a un maltratador que en 2010 golpeó a su pareja hasta el punto de dejarla hemipléjica y con secuelas que la han convertido en una gran dependiente, con necesidad de asistencia continua.
El Alto Tribunal estima que no se produjo un homicidio en grado de tentativa, como estableció en su sentencia la Sección Octava de la Audiencia, sino un intento de asesinato, puesto que el acusado, Jacques Elalouf, actuó con "alevosía". Primero golpeó en la cabeza a la víctima con un objeto, produciéndole un corte profundo y derribándola. Cuando la mujer ya estaba en el suelo, el agresor la atacó "de forma brutal" "aprovechando" que no era capaz de defenderse porque yacía "aturdida y sin posibilidad de reacción". A partir de ahí se desencadenó una "tercera sucesión encadenada de golpes" hasta que el maltratador constató que su pareja, con la que había convivido durante 18 años, ya no se quejaba, lo que le hizo pensar que había "conseguido su propósito de acabar con su vida".
El Supremo alude a la "alevosía doméstica", derivada de la imprevisibilidad de un ataque que se produjo, tras una discusión previa, a la entrada de la vivienda que compartían, cuando la golpeó de forma inesperada con un objeto contundente.
La sentencia de la Audiencia de Málaga reflejaba que la víctima ha sufrido a consecuencia de esta agresión un "deterioro de las funciones cerebrales superiores muy grave", que le han limitado "todas las funciones diarias", hasta el punto de requerir una dependencia absoluta de otra persona, porque no es capaz de cuidar de sí misma.
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