La UMA crea una oficina contra la 'euroburocracia'

El VII Programa Marco de I+D de la Unión Europea agrupa las grandes estrategias comunitarias para fomentar el desarrollo y la investigación. En términos más informales podría decirse que es la caja que guarda nada menos que 50.521 millones de euros para financiar entre 2007 y 2013 los proyectos de calidad y reforzar la innovación en los países de la Unión. El problema es encontrar la llave que abre esa caja. La Universidad de Málaga únicamente logró en el anterior programa marco respaldo económico de la UE para el 19% de los proyectos que presentó. Y aún así fue todo un hito, porque la media de éxito en todos los países europeos fue del 14%. Para tratar de aprovechar mejor los recursos comunitarios la UMA ha puesto en marcha una Oficina de Proyectos Europeos que prestará apoyo directo a los investigadores universitarios para que logren más dinero para sus proyectos con cargo a este programa.

La burocracia es el principal obstáculo que explica la baja tasa de éxito en la obtención de incentivos procedentes de la Unión Europea para la investigación universitaria. Los grupos deben enfrentarse a un casi insalvable número de informes, entre los que figuran los presupuestarios, que incluyen una serie de parámetros nuevos que nada tienen que ver, por ejemplo, con los que se requieren en las convocatorias de ayudas nacionales y andaluzas.

Esta carga burocrática se conjuga con la jerga administrativa, jocosamente conocida en ámbitos universitarios como el bruselensis que tampoco ayuda. Es decir, los informes se redactan en un inglés cargado de expresiones retóricas casi exclusivas del aparato comunitario. En definitiva, los investigadores acaban perdiendo oportunidades y muchas veces tirando la toalla incluso antes de hacer el intento.

A partir de ahora, la Oficina de Proyectos Europeos, abierta en el edificio de los Institutos Universitarios en la calle Severo Ochoa del Parque Tecnológico, se encargará por una parte de apoyar la participación divulgando las convocatorias a través de la web (www.otri.uma.es/proyectos_europeos.asp) y del blog (http:/euroblog.uma.es), así como de respaldar a los investigadores en la gestión. Esta segunda tarea incluye labores de asesoría (manuales de buenas prácticas, glosarios, nueva terminología y dossier) y trabajo de consultoría financiera (cómo adaptar los presupuestos a la modalidad de costes o tipo de financiación), al tiempo que se ocupará de realizar el primer contacto con los agentes externos de la Unión Europea para conocer cómo están los proyectos.

Además, los científicos de la UMA tienen a su disposición en la intranet, entre otros servicios, una herramienta que les permitirá depositar la documentación relativa a sus proyectos, descargar formularios, tablas que incluyen cuáles son costes imputables al trabajo que se realiza y cuáles no e, incluso, un espacio virtual para guardar las facturas.

La Oficina de Proyectos Europeos, presentada ayer por la rectora de la UMA, Adelaida de la Calle, y el vicerrector de Investigación, José Ángel Narváez, ha requerido un presupuesto de arranque superior a los 150.000 euros, de los que un 30% han corrido a cargo de las ayudas dispuestas por el Ministerio de Innovación para apoyar la divulgación del VII Programa Marco de la Unión Europea.