Unicaja y Caja España aprueban modificar el contrato de fusión

Tras aprobar hace dos semanas el nuevo plan económico-financiero para la fusión entre Unicaja y Banco Caja España-Duero (Ceiss) tocaba llevar todos esos parámetros al papel, modificando así el contrato inicial de integración que se firmó en septiembre de 2011. Los consejos de administración de las dos entidades, reunidos ayer por la tarde en Antequera y León respectivamente, aprobaron esa modificación en la que se ha tenido que redefinir todo el proyecto desde el punto de vista jurídico. Fuentes de la entidad comunicaron tras la finalización del consejo, pasadas las 21:00, que esta aprobación suponía "dar un paso más" y que ahora "hay que esperar a recibir las autorizaciones administrativas", por lo que no se definió ninguna fecha para culminar la unión entre las dos entidades. Mientras tanto, desde Unicaja se asegura que "se continuarán los trabajos en los diferentes grupos de integración". El propio presidente de Unicaja, Braulio Medel, dijo ayer en Almería que este cambio en el contrato se trataba de una "prolongación y consecuencia lógica" tras la "redefinición económica" efectuada tras la entrada de determinadas novedades en el ámbito regulatorio del sistema financiero.

Las condiciones son las mismas que ya explicaron ambas entidades el pasado 16 de marzo. No se trata realmente de una fusión ya que Unicaja absorbe toda la actividad financiera y todos los clientes del banco castellano-leonés a cambio de darle el 30% de las acciones. En la operación quedan al margen todos los activos tóxicos de Ceiss, que tendrá que afrontar esta entidad en solitario, en principio, con su participación en los beneficios que arroje Unicaja en este y los próximos ejercicios. El banco castellano-leonés ha pedido 1.000 millones de euros en ayudas públicas del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) para sanear sus deudas, motivadas principalmente por la morosidad en sus inversiones inmobiliarias, mientras que Unicaja tiene abierta una línea de ayuda desde los 375 a los 1.025 millones de euros para afrontar un posible incremento de la morosidad o afrontar nuevos proyectos. Unicaja y Ceiss tendrán un negocio bancario conjunto de 120.000 millones de euros y unos activos totales de 80.000 millones, colocándose como el tercer gran grupo español procedente de cajas de ahorro.