El concurso impulsado por el Ministerio de Fomento para la construcción de una solución ferroviaria barata mediante la que rebajar en unos 20 minutos el tiempo de viaje en tren entre Málaga y Sevilla es objeto de disputa de una veintena de empresas. Esta la cifra de ofertas formuladas para la ejecución del baipás proyectado en el municipio cordobés de Almodóvar del Río, según la información facilitada a este periódico por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif).

De acuerdo con los datos conocidos, tras esta veintena de proposiciones hay 31 empresas. Diez de las ofertas están formuladas de manera individual por otras tantas constructoras, mientras que la otra decena lo está por uniones temporales de empresas (UTE), con 21 firmas. Lo que no ha trascendido es la identidad de las compañías interesadas en hacerse con este contrato de obras. Algo justificado desde Adif en el deseo de las mismas por mantener su confidencialidad. Tampoco se precisaron los detalles económicas de las propuestas. La licitación fue activada el pasado 7 de mayo.

En cualquier caso, el interés despertado en el sector parece evidente. A ello contribuye que se trata de una intervención con un valor de licitación cercano a los 15 millones de euros. Cuantía que se verá incrementada con un segundo procedimiento de contratación relacionado con la señalización del trazado. El plazo estimado para la ejecución de la obra es de 20 meses. Pensando en que la contratación será posible tras el verano, parece factible pensar en que el baipás sea una realidad a mediados de 2021.

Con esta actuación el Gobierno trata de suplir el fracasado eje ferroviario transversal entre Sevilla y Antequera, abandonado hace años por la Junta de Andalucía ante su incapacidad económica para seguir con los trabajos. El concurso de contratación fue abierto tras una larga tramitación que ha incluido la elaboración del documento técnico y el sometimiento a información pública, "a efectos de expropiaciones", del proyecto básico.

A las ventajas propias de ahorrar tiempo en el trayecto, se suma la posibilidad descongestionar el sector de vía de ancho estándar en la estación de Córdoba, así como los movimientos en la cabecera sur de dicha estación, lo que permitirá agilizar las operaciones en sus instalaciones. El baipás proyectado, objeto de una importante polémica, tiene una longitud de 1,7 kilómetros, que se extienden entre el punto kilométrico 363/302 de la línea Madrid-Sevilla, y el 5/211 de la de Córdoba-Málaga, que aprovecharía los escapes ya instalados en las ambas líneas, en Almodóvar y La Marota.

Se prevé una estructura tipo pérgola de 53 metros para solventar el cruce con la línea de ancho convencional Alcázar de San Juan-Cádiz, así como la rectificación de esta línea en aproximadamente un kilómetro y la demolición del paso superior existente en ese punto. Asimismo, se prevé un paso inferior con el objetivo de permitir el paso de la carretera CO-9002, en torno al p.k. 0,964 del ramal de conexión, para salvar el cruce con ésta.

De acuerdo con los datos manejados por Fomento en los últimos años, las infraestructuras contempladas se ajustan a la demanda necesaria para esta conexión, apuntando que el número de circulaciones actuales, seis, no fuerzan a ir más allá que la solución adoptada. Las previsiones del ministerio, hechas públicas a mediados de 2017 por el entonces secretario general de Infraestructuras, Manuel Niño, señalaban que la reducción del tiempo de viaje en 20 minutos permitiría incrementar el número de usuarios de los trenes Avant, pudiendo llegar a multiplicar por cuatro la demanda.

Datos recientes a conocer por Renfe sitúan en 994.200 el número de usuarios que usaron los trenes de Avant Sevilla-Córdoba-Málaga, un 5,3% más que en 2017 y la incorporación de 50.000 nuevos viajeros a este servicio de Renfe en Andalucía. Asimismo, desde la compañía indicaron que en febrero, estas mismas circulaciones cumplieron los once años de servicio, superando los 10,2 millones de pasajeros.