La reunión ante el Sercla (Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía) para mediar en el conflicto por el cierre de la guardería de la Diputación para el próximo curso finalizó ayer sin ningún tipo de acuerdo entre los trabajadores y la institución. Desde el sindicato ASED (Asociación Sindicalismo en Diputación), que había solicitado el acto de conciliación, plantearon que se abriera el plazo de solicitud para nuevas entradas y renovaciones de plazas en el centro infantil, al entender que al no haberse hecho en el mes de marzo se estaba incumpliendo el convenio colectivo por el que se rige la Diputación. De parte de la institución acudió a la reunión un técnico de la asesoría jurídica y la propuesta que realizó se basó en abordar el tema dentro de la negociación colectiva del convenio, que en estos momentos se está llevando a cabo entre ambas partes.

La principal medida de conciliación de la vida familiar y laboral que se propone en el convenio colectivo de la Diputación contempla que "el centro infantil de Diputación acogerá a los hijos/as de los laborales/funcionarios afectos al presente Convenio/Acuerdo". Y en base a ello, el sindicato ASED solicitó al Sercla que mediara en el conflicto por considerar que no abrir el periodo de inscripción y el anuncio del cierre de la guardería conllevan "una modificación de las condiciones de trabajo". Fuentes del citado sindicato explicaron ayer tras el encuentro ante el Sercla que el extremo adoptado por la Diputación "condiciona la negociación del convenio colectivo", porque el punto de partida es el cierre del centro, por lo que en ese sentido ya pocos acuerdos se pueden alcanzar, más allá de medidas compensatorias de otro tipo.

Actualmente, el convenio laboral de la institución está en fase de negociación, por lo que el técnico que asistió ayer el acto de conciliación solicitó abordar el cierre de la guardería en las reuniones en las que se negocian el resto de medidas. El centro infantil se contempla como parte del convenio y, en principio, el margen de espera para la resolución del conflicto podría ser de poco más de un mes, ya que en el mes de julio se espera dar por finalizado el periodo de negociación del convenio y que entren en vigor las nuevas medidas laborales.

El equipo de gobierno de la Diputación anunció el pasado mes de febrero el cierre de la guardería por los gastos excesivos que generaba su mantenimiento y ya en marzo no se abrió el plazo de solicitud de renovación de plazas y nuevas incorporaciones. Como contrapartida, se garantizaba la recolocación del personal del centro -32 trabajadores- y algún tipo de prestación social de la que se podrían beneficiar los trabajadores de la institución con hijos menores de 3 años. En los primeros días tras el anuncio de la no continuidad de la guardería, el diputado de Recursos Humanos, Jesús Fortes, explicó que a la Diputación le era más rentable sufragar el 100% del gasto de los niños de sus empleados en una guardería privada que mantener el centro abierto.