El escarabajo de la ambrosía pone en alerta a los agricultores de Málaga: así afectan a los aguacates

El escarabajo de la ambrosía, el Euwallacea fornicatus, es una especie de insecto que afecta especialmente a árboles frutales, como es el del aguacate, una planta que prolifera en la comarca de la Axarquía. La Junta de Andalucía ha realizado más de 900 actuaciones en las provincias de Málaga y Granada en los últimos para intentar controlar este insecto al que se declaró una plaga en diciembre del pasado 2024.

Desde la institución pública han explicado que estos insectos se dedican a excavar galerías en las ramas de los árboles, donde aloja unos hongos que afectan a las plantas, provocando su muerte. Tras las afectaciones sufridas en ambas provincias andaluzas, la Junta anunció que indemnizará la destrucción de los cultivos de aguacate afectados por el escarabajo de la ambrosía.

Origen del escarabajo de la ambrosía

El escarabajo de la ambrosía es un insecto de tamaño pequeño (hasta 2,5 milímetros de largo en el caso de las hembras y 1,8 milímetros en el caso de los machos) que supuso un problema en la industria del aguacate en países como California, Israel y Sri Lanka. Aunque su origen está en el continente asiático. En 2012 se identificó esta plaga en árboles de aguacates en un barrio residencial de Los Ángeles. Y en 2022 apareció en España, concretamente en Andalucía.

Esta especie de insecto, que vive en simbiosis con hongos del género Neocosmospora, que provocan daños, principalmente en árboles ya debilitados, en cuyas ramas y troncos excavan galerías. Estos hongos pueden provocar la marchitez de las especies hospedantes y, eventualmente, la muerte del árbol. Principalmente, afectan a árboles frutales y ornamentales, como son los de aguacate.

La dificultad en localizar a este insecto radica en su tamaño y en que su ciclo biológico se desarrolla en el interior de los árboles.

Cómo afecta el escarabajo en los árboles

Son las hembras de esta especie las que inician los ataques a los árboles. Expulsan el serrín fuera del árbol, a lo largo de su corteza y base. Según la información recogida por la Junta, cada especie de árbol reacciona de manera diferente a los ataques de estos insectos. Respecto a los síntomas externos, la Junta recoge que:

• Aparecen pequeños orificios de entrada o salida. Los de entrada son perfectamente redondos y de unos 0.85 milímetros de diámetro.
• Manchas en la corteza exterior que pueden ser húmedas y oscuras o secas y de color claro.
• Exudado seco o húmedo en forma de “volcanes de azúcar”.
• Gomosis (resina seca) en el exterior de la corteza.
• Excretas del insecto cuando el nivel de infestación es alto (puede aparecer como “cerillas” largas).
• Marchitez regresiva y finalmente la muerte de los árboles.

La aparición del escarabajo en Andalucía

El primer caso que se detectó del escarabajo ambrosía fue en el municipio granadino de Motril en diciembre de 2023, aunque no fue hasta julio de 2024 cuando se producen las primeras capturas y confirmándose la plaga en agosto de ese año.

En los últimos meses, desde la Junta se amplió la red de trampeo y se realizaron más de 900 actuaciones en las provincias de Granada - 804- y Málaga -162-, en caso de sospecha, confirmándose en su mayoría la "no presencia de la plaga", han señalado desde el Gobierno andaluz.

En diciembre de 2024 la Junta lo declaró plaga, y puso en marcha una serie de medidas fitosanitarias. Entre las acciones que se propusieron para los titulares de las explotaciones agrícolas, señalaban:

• La realización de prospecciones para determinar la presencia de la plaga específica y permitir el acceso a la autoridad competente.
• Comunicar la sospecha de la presencia de la plaga o su detección a la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la provincia correspondiente.
• Realizar tratamientos fitosanitarios, en caso de detección o sospecha, con productos autorizados, así como las restantes medidas de control (culturales, mecánicas, físicas y biológicas) que se establezcan.
• Hacer podas selectivas de las ramas afectadas con aplicación de pasta cicatrizante en las heridas (cuando la afección está bien delimitada) o arrancar y destruir los ejemplares de los árboles o arbustos más afectados.
• Destruir de forma inmediata estos restos (preferentemente mediante trituración) y aplicar insecticida.
• No compartir vehículos, medios de transporte, cajas y contenedores de fruta, ni otros elementos y desinfectar las herramientas, equipos mecánicos y materiales empleados.