Una afición que se mide en años

Nombres como el de Miguelillo el del Palo, el Guti chico, Antonio León, Miguel Ángel Blanco, también conocido como Aarón, o Miguel Ángel Merchán, entre otros, vuelven a estar en primera fila del Carnaval. Y es que a pesar de algunas bajas de grandes carnavaleros como Carlos Pariente, David Santiago o Benjamín Pastor, el número de agrupaciones participantes sigue siendo el mismo que el de la pasada edición.

Una afición que se extiende más allá del mes de febrero, que requiere sacrificio y, sobre todo, mucha dedicación, pero que en muchos casos nace desde muy pequeños. Ya han pasado más de tres décadas desde que Jesús Gutiérrez, alias el Guti chico, acompañara vestido de marengo a la agrupación Caracola Perchelera en el primer desfile de los años 80, pero en esta edición vuelve con la misma ilusión de aquella primera vez estrenando tipo con voces veteranas como las de Antonio León, José Gallego o José Redondo. "Venimos todos con muchas ganas de Carnaval y de llegar a la calle, porque aunque es verdad que nos preparamos para el teatro, es fuera donde se ve la verdadera afición", expresa.

La comparsa La banda del churrete es un proyecto nuevo en el que se mezclan voces nóveles con otras más consolidadas que buscan su armonía bajo la dirección de Jesús Gutiérrez, quien presume de tres primeros premios en la modalidad de comparsa: El barrio (2000), Los estudiantes (2005) y Febrerillo el loco (2009). Quien también se estrena en la dirección de su propio grupo es Juani Bermúdez. "Me siento como un niño chico, como si fuera la primera vez que salgo", comenta. Con la compañía del letrista Miguel Ángel Blanco, también conocido como Aarón, Juani debuta en la autoría musical de la comparsa La Traviesa. "Otros años solo me he dedicado a cantar pero este año llevo toda la responsabilidad. La música es entera mía, va a sonar a mí, va a sonar distinto", señala. Quien pusiera voz femenina al Carnaval de Málaga, Aarón, añade: "Juani aporta un estilo totalmente diferente a lo que hay ahora mismo, le está dando un nuevo sello, más moderno y actual".

Juani Bérmúdez y David Santiago han compartido muchos febreros juntos, quien el año pasado recibió el segundo premio con la comparsa El guardián. Pero su decisión de tomar un año de descanso llevó a Bermúdez a armarse de valor para dirigir su propio proyecto, cuya presentación tendrá lugar este fin de semana durante las previas de La Victoria y Cruz de Humilladero. Tampoco participará este año en el concurso de canto la comparsa de Arroyo de la Miel, quien desde 1994 no ha faltado a una sola cita del Coac, pero que se prepara para coger fuerzas para el Carnaval de 2015. Y es que la unión de musicalidad, la coreografía, las letras, y todo ello envuelto en un disfraz simpático requiere horas y meses de ensayo que en muchos casos se traduce en sacrificios personales y familiares, lo que obliga a algunos grupos a tomar la decisión de parar la actividad para retomarla posteriormente.

Los hay que ya disfrutan de su regreso, como Miguel Ángel Merchán, aunque en realidad siempre estuvo ahí. "La calle te da un aliciente que es quitarte la presión y ensayar más distendidamente durante los meses de ensayo. Esa es nuestra forma de descansar", aclara. Tras participar en la pasada edición en el Carnaval de calle con la murga Los bufones de la corte, este año vuelven a las tablas del teatro con ¡Viva el rey!

Han pasado muchos febreros desde que Merchán debutara en 1999, aunque no son pocos los primeros premios que lleva a sus espaldas: Sin rodeo (2001), In-fraganti (2004), Culo veo, culo quiero (2008) o Las Bic Mac del Charleston (2011), entre otros. "Tengo que ir a ganar, si no no me planteo una meta tan alta. He sido siempre muy exigente y nunca dejo de exigirme", añade. Al mismo tiempo, señala que, al igual que otras agrupaciones, las actuaciones no se quedan únicamente en los teatros Alameda y Cervantes, sino que se preparan para otros carnavales como el de Arroyo de la Miel, Alhaurín o Marbella, entre otros. "Una vez que nos metemos en faena intentamos ir a todo lo que no nos pise la fecha", explica, "aunque por más que queramos esto no deja de ser un hobby, no vivimos de esto".

Otra de las caras más esperadas es la de Miguel Bermúdez, o Miguelillo el del Palo, quien vuelve a las tablas después de seis años con Francisco Arca en la murga Acejo, mi villano favorito. "En ellos veo la ilusión que yo he perdido", manifiesta. No solo compone la música para el grupo sino también la letra, además de ayudarles con la afinación, aunque confiesa que solo se dejará ver acompañando a voz y guitarra en el concurso oficial, "de momento no me planteo volver".

El guitarrista Paco Ortega, el percusionista Andrés Padilla, alias Jerez, así como el padre y el hermano pequeño de Miguel Bermúdez son algunos de los veteranos que se han reunido con Francisco Arca en este nuevo proyecto. "Llevo a los padres del Carnaval del Palo conmigo. Cada día es una experiencia nueva, aprendo todos los días de Miguel, pero lo que mayormente tengo es una especie de intriga y miedo, una responsabilidad muy grande porque llevo unos nombres muy fuertes", comenta. Arca se estrenó en el año 1996 con las murgas infantiles de Miguel Fernández, dirigió agrupaciones femeninas, y después de pasar por varios grupos decidió montar el suyo propio. En cuanto a las previas, afirma que más de la mitad será un repertorio totalmente nuevo. "Vamos a lanzarnos para ir viendo la reacción de la gente", apunta.

También los hay que están de cumpleaños, como la que dirige Alberto Zumaquero y que este año celebra su 15 aniversario. Los Muariscos, que este año componen la murga Sigue buscando, acumulan cuatro primeros premios: Voy pa'bao (2005), Los frescos (2006), No hay tres sin dos (2007), Los viva la vida (2013), y están dispuestos a revalidar título. "Cada dos o tres años nos gusta darle una vuelta de tuerca, y este año nos movemos en un registro en el que nunca nos hemos movido", añade. Eso sí, aseguran que donde más disfrutan es en la calle. "Nos gusta más estar a pie de calle que en un escenario de forma oficial, te encuentras con otro tipo de público, enganchas más con ellos", aclara.

La crisis, la infanta, las nuevas tecnologías u otros como las obras del Metro podrían estar entre el repertorio de cualquier agrupación. En Málaga ya suena el Carnaval.