marítimas

Un año de éxito

  • Los astilleros Mario López cierran 2014 con cincuenta buques reparados y un aumento en su plantilla

El año 2014 pasará a la historia portuaria malacitana por haber sido en el que más toneladas se han movido en el ámbito de las reparaciones navales. Cincuenta buques, 14 en seco y 36 a flote, conforman los muy buenos números con los que los astilleros Mario López cerrarán el presente año; un año en el que las reparaciones de barcos han constituido lo más significativo de la actividad portuaria malagueña.

Manteniendo un constante goteo de barcos mes a mes y ocupando en determinadas ocasiones, además del dique flotante Andalucia, varios muelles del puerto, en julio, los astilleros malagueños trabajaron sobre seis buques a la vez; una muy significativa circunstancia nunca vista hasta la fecha.

Ante esta intensa y continuada carga de trabajo, la plantilla de operarios que iniciaban el año -en enero la componían 70 trabajadores-, se ha visto ampliada hasta los 120; un incremento que eventualmente se ha triplicado con diferentes refuerzos externos llegados fundamentalmente de Cádiz en función de las necesidades particulares de cada uno de los trabajos requeridos.

Operando con amplio ramillete de navieras -en 2014 han pasado por Málaga, entre otros, barcos de Maersk, Grimaldi, Cosco, Bernhard Schulte, Anhony Veder, Boskalis o Besix-, los astilleros Mario López, que también han reparado buques de Salvamento Marítimo, afrontan 2015 con unas muy alentadoras expectativas de trabajo. Manteniendo la fidelidad de estas compañías y con la necesidad de disponer de más espacio, el uso concesionado de la totalidad del muelle 5, parte del 6, e incluso una coparticipación en la línea de atraque del muelle de contenedores, son algunas de las alternativas que Mario López ya ha puesto sobre la mesa para mantener e incrementar la actividad de este sector en el puerto malagueño. Un sector que a tenor de los números obtenidos se consolida como el más productuivo y con más expectativas de futuro en la vida de los muelles malacitanos.

Con las ideas muy claras y con el mismo apasionamiento con el que llegaba a Málaga en el año 1980, Mario López Trujillo, cabeza gestora de los astilleros que llevan su nombre y del grupo Cernaval, alude a la ilusión como el principal factor para haber conseguido los exitosos resultados de 2014: "La constancia, un buen equipo y la flexibilidad de todos los actores implicados directa e en este trabajo, constituyen las principales claves de estos resultados".

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