Un niño de 15 años, detenido por traficar con marihuana en su colegio

Otro menor arrestado como presunto suministrador de la droga · La mensajería instantánea de Blackberry era utilizada para canalizar la compra-venta del estupefaciente · Los consumidores tienen de 13 a 16 años

Agentes de la Policía Nacional durante una patrulla rutinaria en las proximidades de un centro educativo.
Agentes de la Policía Nacional durante una patrulla rutinaria en las proximidades de un centro educativo.
Encarna Maldonado / Málaga

09 de mayo 2012 - 01:00

Un niño de 15 años ha sido detenido por agentes de la Policía Local de Málaga por presunto tráfico de drogas entre los alumnos del colegio al que asiste, al tiempo que otro menor, de 17 años, ha sido también arrestado como posible suministrador de la marihuana que se distribuía en el centro.

La investigación ha puesto de manifiesto que el adolescente de 15 años y los consumidores, escolares de su colegio de entre 13 y 16 años de edad, utilizaban el servicio de mensajería instantánea de sus teléfonos Blackberry para comprar y vender la droga. Este servicio de mensajería es exclusivo para los smarphone de esta marca canadiense y son imposibles de interceptar, si bien los mensajes que se intercambian sí suelen quedar grabados en la memoria RAM del aparato. Esta aplicación es muy popular entre los adolescentes y fue la que utilizaron masivamente los jóvenes londinenses para comunicarse, citarse y contar sus supuestas hazañas durante los graves disturbios que tuvieron lugar el verano pasado.

La primera detención tuvo lugar hace dos semanas. Entonces fue arrestado el niño de 15 años, al que se le intervino una pequeña cantidad de droga. También fueron identificados parte de los consumidores, todos alumnos de un colegio concertado ubicado en la zona este de Málaga.

Los investigadores continuaron las pesquisas hasta localizar a un segundo menor de edad. Este adolescente, de 17 años, ya no es estudiante del mismo centro y supuestamente era el encargado de facilitar la marihuana al vendedor del colegio.

Las fuentes consultadas han resaltado que se trata de menores de familias cultural y económicamente bien posicionadas e, incluso, uno de ellos con un buen expediente académico.

Tras las detenciones, los menores prestaron declaración acompañados por un progenitor y asistidos de abogados ante los investigadores de la Policía Local. Tras quedar a cargo de sus respectivos padres fueron citados para que comparecieran al día siguiente en Fiscalía de Menores, que desde que el inicio ha estado informada del curso de la investigación. Una vez que declararon ante el Ministerio Público los dos adolescentes quedaron bajo la autoridad paterna mientras se instruye el procedimiento.

La Policía Local se ocupa de la seguridad en los centros educativos en una doble dirección. Por una parte personal uniformado se ocupa de controlar el tráfico durante el horario de entrada y salida de los colegios, mientras que los agentes de paisano mantienen desde hace tiempo un plan operativo de presencia en los institutos considerados más conflictivos, que comprende la vigilancia de los alrededores para impedir el consumo de estupefacientes tanto antes de que comiencen las clases como al término y durante los recreos.

Por otra parte, la última memoria de la ONG Proyecto Hombre indica que el 67% de los menores de 14 años que acuden a sus especialistas para recibir tratamiento ha probado en alguna ocasión el cannabis, mientras que el 58% se ha iniciado en el alcohol y el 25% ha probado la cocaína. Estos porcentajes remontan de forma significativa entre los menores de 16 años que solicitan ayuda a Proyecto Hombre. De ellos, el 97% ha tenido alguna experiencia con el cannabis, el 92% con el alcohol y el 71% con la cocaína.

La experiencia de esta ONG a través del Programa de Adolescentes y Menores indica que la edad de inicio en el consumo de sustancias tóxicas es hacia los 12 años. En sólo siete años se ha reducido en tres la edad en la que los niños empiezan sus primeras experiencias con las drogas y el alcohol.

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