Arranca el montaje del trono de la Virgen de la Esperanza en Roma para el Jubileo de las Cofradías

Roma/Han comenzado ya las labores de montaje del trono de María Santísima de la Esperanza en el interior del tinglado instalado en la piazza Celimontana de Roma, desde donde saldrá en procesión el próximo sábado 17 de mayo con motivo del Jubileo de las Cofradías. Este será también el punto de partida del paso del Cristo de la Expiración de Sevilla, El Cachorro, las dos únicas imágenes que saldrán desde esta estructura monumental, diseñada especialmente para esta ocasión.

El tinglado, de 30 metros de largo por 15 de ancho y 10 de alto, presenta una estética que recrea la simbólica Puerta Santa, y ya se erige como uno de los puntos neurálgicos de los preparativos en la capital italiana. Su construcción responde a la necesidad de contar con un espacio capaz de albergar el trono de la Esperanza de Málaga, cuyas dimensiones impiden su salida desde cualquier templo romano.

En su interior han comenzado los trabajos para el ensamblaje del trono de la Virgen malagueña, que fue trasladado en camiones hasta Italia, junto al paso sevillano, a través de un operativo logístico coordinado por la empresa DSV. Ambas estructuras ya se encuentran en Roma, a la espera de la llegada de las imágenes, que serán expuestas al culto los días 14, 15 y 16 de mayo en la Basílica de San Pedro del Vaticano.

El acto central del Jubileo, la Gran Procesión, recorrerá un itinerario de 3,75 kilómetros por el centro histórico de Roma, con salida y llegada en la piazza Celimontana. Según los últimos ajustes comunicados por la organización, el evento dará comienzo a las 14:00 horas, y no a las 17:00 como estaba previsto inicialmente. La salida del Cristo del Cachorro está fijada para las 15:00, mientras que el trono de la Esperanza de Málaga lo hará a las 15:30.

Antes de su salida, habrá una primera procesión con imágenes provenientes de seis países, incluidas otras hermandades españolas como la Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno, de León. Aunque aún no se conocen detalles del resto de estructuras previstas para el resto de participantes, todo apunta a que el tinglado de Celimontana será el epicentro visual y emocional de una cita histórica para la religiosidad popular española en Roma.