Unos atracadores se atrincheran en una casa durante cinco horas

La sucursal bancaria de Unicaja en Campillos sufrió ayer un nuevo golpe. Dos individuos de nacionalidad española atracaron ayer a punta de escopeta y machete la entidad número dos ubicada de la Avenida Constitución y después se atrincheraron durante cinco horas en una vivienda.

Los hechos ocurrieron pasadas las nueve de la mañana, cuando los delincuentes entraron con pasamontañas y cascos de motos para ocultar sus rostros. Armas en mano, amenazaron a los trabajadores y al director de la oficina para que les diera todo el dinero. El atraco duró unos cinco minutos, y en ese tiempo los ladrones se hicieron con un botín de unos 5.000 euros, que lo celebraron deseando Feliz Navidad a los cinco clientes que había en ese momento y a los tres trabajadores. Según fuentes presenciales, los ladrones son "de poca monta" porque huyeron en una motocicleta de color negra de baja cilindrada, que previamente habían aparcado en la puerta para utilizarla en su huida.

Segundos más tarde, los delincuentes eran perseguidos por la Policía Local y la Guardia Civil, donde los acorralaron en un edificio colindante a la sucursal haciendo esquina con la Avenida Constitución y la calle Gerardo Fernández Delgado. El dispositivo de seguridad, incluida la policía judicial, estuvo hasta las 17:00, hora en la que entraron al piso, encontrando el botín y procediendo a la detención de los individuos.

La Guardia Civil también encontró en el patio interior del edificio la escopeta de cañón recortado, el machete y los pasamontañas que utilizaron los ladrones.

A la zona acordonada se acercaron una multitud de vecinos arrastrados por la curiosidad. Las "interminables" horas las vivieron con "nervios e interés". "Esto no pasa todos los días, y menos con tantas cámaras de televisión. Queremos verle la cara y saber quiénes son", apuntó un vecino.

En lo que va de año, la entidad bancaria ha sufrido tres atracos. Uno en una sucursal en Casabermeja, otra en el polígono industrial de Antequera, y éste último en Campillos. Además, hace dos meses, unos individuos de origen suramericano se llevaron 20.000 euros en un descuido de un trabajador y, hace poco más de un año, una banda de rumanos arrancaron de cuajo con la ayuda de un tractor el cajero de Unicaja del anejo antequerano de Cartaojal, aunque no lograron abrirlo.