Tiene nombre de flor, pero va a liquidarse un túnel de 2 kilómetros en un tramo de 4, y a una profundidad de 20 metros en menos de seis meses. El Plan Málaga, que articula las obras de ampliación del aeropuerto, ha incorporado a los trabajos de construcción de la segunda pista del aeródromo la primera tuneladora que se utilizará en la capital malagueña.

La han bautizado como la Biznaga, pero es un armatoste de metal y proporciones descomunales (162 metros de largo por 9, y 5 de ancho) que han tenido que desmembrar en Madrid para poder transportarla hasta Málaga, donde vuelven a soldarla pieza por pieza.

La vía del Cercanías Málaga- Fuengirola interfería en la segunda pista del aeródromo y el proyecto de ampliación del aeropuerto decidió absorberla de forma expeditiva soterrándola desde el apeadero del Polígono Guadalhorce hasta la misma terminal del aeropuerto, quedando ambas estaciones bajo tierra. Con esta obra, además, se consigue que se doble el ancho de vía (y la frecuencia de trenes) y que los pasajeros se apeen en la misma terminal. En este mismo punto habrá una parada de metro.

La tuneladora avanzará bajo tierra a un ritmo de 15 metros al día, evacuando la tierra y construyendo el túnel sobre la marcha. Todo a la vez, a medida que se desplaza.

El aparato, valorado en más de 24 millones de euros, incorpora en su interior unos vagones de tren que circulan sobre raíles (con doble vía) y que son los encargados de sacar la tierra al exterior mientras va perforando. La maquinaria también dispone de un sistema con cepillos que van eliminando el agua que va encontrando a su paso.

Está previsto que la tuneladora empiece a trabajar a principios del próximo mes de noviembre y que complete el túnel en un período récord de seis meses. A su potencia, se une un plan de ejecución delirante compuesto por un centenar de personas que van a trabajar las 24 horas del día, los siete días de la semana. En ningún momento será necesario interrumpir el servicio ferroviario, advirtieron.

Ramón de Bustos, director del Plan Málaga, estima que el tren pueda estar funcionando en su nueva vía el próximo mes de febrero de 2010.

Todas las piezas se trasladan por separado hasta el pozo de ataque (punto desde el que arranca el túnel en la estación de tren del Polígono Guadalhorce). Una vez allí se montan a una profundidad de 12 metros desde donde se activará para que empiece a funcionar.

El proyecto contempla intercalar el trabajo de la tuneladora con muros pantalla a lo largo de 4 kilómetros hasta que el tren vuelve a salir en superficie, a un kilómetro del aeropuerto.

Los operarios trabajaban ayer en la rueda de corte, pieza que encabeza la máquina y encargada de abrirse paso bajo la tierra.

Las obras de ampliación del aeropuerto de Málaga suponen una inversión de 1.100 millones de euros. A su término, el aeródromo malagueño tendrá el doble de capacidad que el actual. Es un proyecto de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) y el Ministerio de Fomento que dotará al aeropuerto de una nueva terminal de pasajeros y una segunda pista de aterrizaje.