Las camas para pacientes psiquiátricos graves en Málaga son un tercio de las recomendadas

El déficit estructural de camas para pacientes psiquiátricos graves en la sanidad pública de la provincia no se resuelve. “La situación es igual o peor que hace 10 años”, sostiene el presidente del Sindicato Médico de Málaga, Antonio Martín.

Según las estimaciones de esta organización, serían necesarias unas 150 camas más para cumplir las ratios marcadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en función de la población provincial. La proporción que estipula la OMS es de entre 12 y 15 camas por 100.000 habitantes. Y apenas hay un tercio de esta cifra.

En la actualidad, la sanidad pública cuenta con casi 90 plazas de Salud Mental para agudos, que son los pacientes psiquiátricos más graves. De éstas, unas 40 corresponden al Hospital Regional, una treintena al Clínico y 15 de subagudos (para enfermos de menor gravedad) al Marítimo de Torremolinos.

La ratio española ya está por debajo de la europea. A su vez, la andaluza –de unas siete camas por 100.000 habitantes– es inferior a la del resto del país. Y dentro de la comunidad autónoma, la de Málaga es todavía peor. Por eso, Martín concluye que la situación de la sanidad malagueña en cuanto a camas de agudos de Salud Mental “de las peores a nivel nacional”.

Pero además del “déficit estructural”, desde la organización sindical se denuncia la “desigual distribución” de los recursos. Precisa que mientras la zona este de la provincia cuenta con unas 40 camas de agudos en el Hospital Regional, la de la parte occidental –que es la más poblada– dispone de unas 30 en el Clínico. Cierto que con unas 15 de subagudos que sirven de válvula de escape, en el Marítimo.

La ampliación inacabada del Hospital Costa del Sol, donde desde hace casi dos décadas se proyecta una veintena de camas para pacientes psiquiátricos graves, demora la apertura de este recurso y provoca la saturación en determinadas épocas del año de la Unidad de Agudos del Clínico, que atiende a media capital, la Serranía de Ronda, el Guadalhorce y la parte occidental de la provincia hasta el límite con Cádiz.

Martín reconoce que hay proyectos en marcha para solventar ese déficit: la finalización de la ampliación del Costa del Sol ya desbloqueada y una unidad para una atención más centrada en los adolescentes en el Hospital Civil. “Pero llevamos unos 15 años de retraso”, insiste.

A la desigual distribución de los recursos achaca Martín que periódicamente la Unidad de Agudos del Clínico se sature. De hecho, a mediados de este mes de marzo, el sindicato denunció el “colapso” de ese dispositivo. No es la primera vez. Es una situación recurrente, sobre todo en determinados periodos del año, como la primavera, en los que los pacientes sufren un empeoramiento de su estado de salud.

Frente a las por lo menos 12 camas para pacientes psiquiátricos graves por 100.000 habitantes que aconseja la OMS, la provincia de Málaga tiene “sólo un tercio de lo recomendado. El déficit es estructural y la zona que atiende el Clínico es la que está peor”, insiste Martín. Porque, recalca, donde existe más demanda es donde hay menos recursos.

Cuando hace un par de semanas el Sindicato Médico sacó a la luz la saturación del Clínico en esta especialidad, precisó que la falta de sitio en la Unidad de Agudos obligó a que siete enfermos aguardaran en Urgencias, con la “merma” en la calidad asistencial que eso suponía para los pacientes. Una situación que el hospital calificó de “puntual” y en vías de solución. Pero desde el SMM se recuerda que más de una vez ha habido enfermos “en los pasillos y en el comedor (como se ve en la foto)” por la falta de sitio.

La organización reclamó entonces que mientras de forma “urgente” se busca una solución definitiva a las carencias, se haga un concierto con San Juan de Dios o Sagrado Corazón para poder derivar pacientes y aliviar la saturación existente. Según afirma a el sindicato, ya se han concertado de forma transitoria por dos meses una quincena de camas.

Los especialistas estiman que en torno a una cuarta parte de las personas sufrirán a lo largo de su vida algún problema de Salud Mental, incluyendo en ese porcentaje también los casos menos graves.