Las necesidades del alumnado vulnerable no terminan de entrar en las aulas de Málaga: "No se puede dar clase así"

Lucas tiene cinco años. Hace tres, su neuropediatra le diagnosticó Trastorno del Espectro Autista (TEA). El niño necesita una maestra sombra, pagada por la familia, para poder afrontar su día a día en la escuela donde comparte aula con 23 compañeros más, de los cuales tres también tienen necesidades especiales. "Es agresivo y a veces se autolesiona. Este curso el personal destinado a este colectivo tiene que atender a más alumnos. Me dicen en el colegio que no dan abasto. ¿Te imaginas una maestra sola con 24 niños, de los cuales cuatro tienen necesidades especiales? Eso no es sostenible", denuncia su madre, Nieves España Rico.

La directora del Ampa Sierra y Mar del CEIP La Axarquía en Vélez-Málaga se concentrará junto a más familias en el Parlamento andaluz el 24 de septiembre para reclamar "una educación pública de calidad inclusiva". La plataforma de familias Neurodiverso movilizará un autobús desde la capital a San Telmo donde el PSOE presentará un proyecto de ley sobre mejoras en la normativa de educación referente a la falta de atención a la diversidad. "Los recursos son insuficientes. No se puede dar clase así", critica entre lágrimas Sandra Bautista, socia fundadora de la plataforma malagueña y madre de una niña de diez años con autismo y epilepsia.

Respecto a la atención a la diversidad, Málaga alcanza este curso la "cifra récord" de 2.342 profesionales destinados al alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo (NEAE) en los centros de la provincia con 414 orientadores; 952 maestros de Pedagogía Terapéutica; 372 maestros de Audición y Lenguaje; y 604 PTIS (Personal Técnico de Integración Social). "Se trata de 658 profesionales más que con los que contaba Málaga en el curso 2018/19, lo que supone un incremento de los recursos del 39,1% respecto al último año de gobierno socialista", destacan fuentes de la delegación de Educación en la ciudad.

Para Bautista, los recursos destinados a los menores con necesidades especiales en la provincia son "escasos". "Hay colegios en Málaga donde no han venido los PTIS, alumnos con esas necesidades y no están siendo atendidos por los PTIS porque no están cubiertos. Necesitamos más maestros de PT, maestros de AL, PTIS e intérpretes de lengua de signos", insiste. Desde Neurodiverso también reclaman que "se le dé más valor a la figura del mediador comunicativo, dedicado a personas sordas, sordociegas y con discapacidad auditiva".

La plataforma malagueña siente que las familias que tienen menores con necesidades especiales viven "un maltrato institucional horrible". "Nuestros niños por las diferentes patologías requieren unos recursos educativos adecuados a sus necesidades y nos los tienen", denuncia. "Imagínate un maestro de Audición y Lenguaje dando clases dos veces a la semana, media hora, compartidas con cuatro alumnos. ¿Cómo hace su trabajo así?", se pregunta.

Entre sus reivindicaciones piden que los orientadores tengan 250 niños de ratio máxima y que estén a jornada completa. "No puede ser que los orientadores, personas que identifican las necesidades de diferentes alumnos, estén desbordados. Esto implica menor detección de casos y mayor índice de fracaso escolar", alerta la socia fundadora de Neurodiverso.

Ese "déficit" en el personal, que llevan denunciando las familias y los sindicatos mucho tiempo, "no sólo lo sufre mi hijo como niño neurodivergente, sino el resto de sus compañeros que se enfrentan a una situación donde hay 24 niños dentro de un aula", señala la madre de Lucas mientras pone el foco en que "hay cuatro menores que se pueden desbordar y una única profesora acompañada de una maestra sombra para atenderlos". Tampoco "hay derecho" a que "un PTIS, un PT o un AL esté en tres centros diferentes y tenga una ratio de 40 alumnos". "¿Cómo lo hacen? Nos están dando migajas", reprocha.

Pilar Triguero, portavoz de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres (Fdapa), ya señaló en este periódico que los recursos humanos destinados a la atención a la diversidad son "insuficientes" hoy día. "Se trata de orientadores y maestros de pedagogía terapéutica. Siempre necesitamos más y sobre todo necesitamos rapidez por si varía el número de alumnado al haber nuevos diagnósticos", recordó en una entrevista.

Maestros sombra

La Junta y la Federación Autismo Andalucía firmaron un convenio al inicio del curso para que hubiera profesores sombra en los colegios públicos y concertados. Esta figura en las aulas ayuda a la integración socioeducativa de niños que tienen dificultades para trabajar por sí mismos. Lo pagan las familias o los Ampas de los centros. El Gobierno andaluz no destina presupuesto a esta figura, sino que llega a un acuerdo con asociaciones federadas a través del cual estos docentes son voluntarios y reciben dinero en concepto de donación para su transporte o su comida.

"Yo la pago. Debo pertenecer a una asociación federada y que me haga el proyecto. ¿Cómo le digo a una persona que va a pasar 15 horas semanales con un niño, que se autolesiona él o que agrede cuando se frustra, que lo va a hacer de manera voluntaria y sin cobrar? No vendría nadie. Va a recibir bocados, tirones de pelo, guantazos, patadas. Nosotros tenemos que buscar a una persona que haga de maestro sombra. Ya está bien de que nos pidan tanto a las familias o que lo poco que tenemos en el colegio nos lo quiten", critica.

Unas 2.000 personas tomaron las calles del Centro en mayo de este año para pedir más recursos destinados a los menores con necesidades especiales. En la protesta, sindicatos, familias con hijos (entre ellas muchas asociadas a la plataforma Neurodiverso) y representantes políticos denunciaron la sobrecarga a la que se enfrentan los docentes que atienden a este colectivo vulnerable como los niños con TEA en los colegios por falta de personal. A principio de septiembre, justo antes del inicio de curso, los PTIS se concentraron en la delegación territorial de Desarrollo Educativo de la Junta para denunciar su "extrema precariedad". Izquierda Unida y Comisiones Obreras exigían mejores condiciones laborales para el Personal Técnico de Integración Social.

Origen de la plataforma Neurodiverso

Este proyecto nace en 2022 cuando un grupo de madres con hijos que tenían diagnósticos diferentes se unen. "No encontrábamos una asociación que nos acompañara. Nadie te explica casi nada. Teníamos muchísima dificultad conciliando. No hay un acompañamiento familiar en las instituciones. Ni a la hora de firmar documentos ni te informan sobre los derechos que tienes por tener un descendiente con discapacidad. Nos sentíamos a la deriva", resume Bautista.