Ser cofrade sale bastante caro

Ser cofrade cuesta una media de 150 euros. La Unión de Consumidores de Andalucía ha elaborado un informe sobre la Semana Santa en clave de consumo en el que se recoge que el precio de las túnicas más caras puede elevarlo hasta los 900 euros.

Hasta hace algo más de una década, ese mercado cofrade quedaba restringido a los enseres e indumentarias propias de quienes participaban en la celebración, pero en la actualidad "no conoce límites ni en el comercio tradicional ni en el virtual, ya que las nuevas tecnologías han propiciado las tiendas en la red con una oferta ingente, variopinta y a veces pintoresca de productos de todo tipo", según el informe.

El hábito penitencial, abonar las cuotas y las limosnas establecidas a tal efecto son los gastos mínimos de cada cofrade, si bien el coste puede ser muy superior en aquellas corporaciones con indumentaria de tejidos nobles y otros elementos de lujo como cíngulos y escudos en hilo de oro, zapatos con hebillas de plata.

También hay que destacar el mundo de los hombres de tronos y pasos, igualmente diverso y en el que los costes mínimos en sus versiones más modestas se sitúan en unos 60 euros, "aunque se pueden incrementar notablemente en función del virtuosismo que empieza a hacer fortuna en los diferentes componentes de su indumentaria, indicó UCE.

El precio medio de túnica de cola o capa y antifaz oscila entre 150 y 300 euros en función de tipo y calidad del tejido. Se escapan las indumentarias completas en terciopelo (con precios en torno a 500 euros). Los escudos, con precios entre 10 y 30 euros para los bordados en seda de colores según tamaño. Por encima se sitúan los bordados en hilo de oro y los artesanales (entre 60 y 150 euros).

Todo un lujo para algunos y un gusto para otros.