Un colectivo de boticarios pide la libre apertura de farmacias

Una plataforma de farmacéuticos reclama la libre apertura de boticas. Es decir, que baste con el título para poner en marcha una farmacia, sin necesidad de cumplir una serie de baremos que en la actualidad estipulan las administraciones.

El tesorero de Plafarma, Gabriel Escamillas, argumenta que con la legislación en vigor un profesional que está en posesión de un título debería tener la posibilidad de abrir una botica. "Sin embargo, no puede acceder a una farmacia salvo que la herede o sea millonario para comprar una", protesta.

Para Escamillas un titulado no tiene por qué tener que trabajar 20 años como adjunto o trabajar mucho tiempo en un pueblo para poder instalarse su propia botica.

En Andalucía, se aprobó en 2007 una ley que regulaba las farmacias. En aplicación de su articulado, en 2010 se abrirán en la provincia 72 nuevos establecimientos. Pero para Escamillas, los baremos que aplica la Administración autonómica imponen una asignación restrictiva, cuando cualquier titulado debería poder abrir una farmacia. "Que la Junta nos controle cuanto quiera, pero que podamos ejercer la profesión sin restricción; que controle el funcionamiento y las instalaciones, pero no el acceso", argumentó.

Desde Plafarma se aboga por el modelo navarro, que permite una botica por cada 700 habitantes y con una separación de 150 metros entre sí; muchas más que con el modelo que impera en el resto de las comunidades autónomas. Las discrepancias de algunos profesionales con estos criterios ha originado sendos pleitos de farmacéuticos de Asturias y Granada ante el Tribunal Superior de las Comunidades Europeas de Luxemburgo. Las demandas están pendientes de resolución.

Escamillas critica además que desde 1997 no se abran farmacias. "La Junta de Andalucía tardó diez años en sacar una ley autonómica y ahora hay pasado otros dos años y todavía no se abren", lamentó. "Llevamos doce años sin poder solicitar una farmacia y ahora la Junta nos dice que tiene que ser por concursos que sólo favorecen a los farmacéuticos instalados", concluyó.