El repentino anuncio del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, de que municipalizará finalmente la empresa de limpieza Limasa ha pillado por sorpresa incluso a los propios trabajadores con los que no se reunió previamente. Aún así, el comité de empresa se mostró satisfecho con el hecho de que "por fin se haya convencido de que es mejor que el servicio sea público" y sugirió que "estamos 24 horas al día y 365 días al año disponibles para sentarnos a hablar".

La disposición de los representantes sindicales es total para tratar de avanzar en la idea lanzada por De la Torre el pasado lunes durante el debate del Estado de la Ciudad, aunque el presidente del comité de Limasa, Manuel Belmonte (UGT), advirtió en declaraciones a este periódico que "ahora no estamos en la misma situación que hace dos años". Se refirió así al reciente fallo del Tribunal Supremo que ratifica la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) en julio del año pasado y que venía a invalidar los recortes aplicados por parte de la empresa a los trabajadores tras la huelga de 2013, al entender que los mismos no estaban amparados por convenio laboral alguno. Conforme a ello, Limasa debe restituir los conceptos anulados para el período 2013-2015, como la congelación salarial para esos años, la reducción de la paga de productividad, la cancelación de la cesta de Navidad en 2014 y otras cuestiones relacionadas con las vacaciones de verano y los descansos.

"Ahora no partiríamos desde el mismo punto de partida", dijo Belmonte en relación a la negociación que entiende que deberá iniciarse tras conocer la intención del alcalde malagueño de municipalizar Limasa. Eso sí, aclaró que si bien en conceptos salariales no están dispuestos a ceder, sí lo harán en otros aspectos con los polémicos puestos heredados.

Sea como fuere, Belmonte se mostró convencido de que el servicio siendo municipal "funcionará sí o sí", siempre y cuando insistió que el Ayuntamiento de la capital dote al servicio de los medios humanos y técnicos necesarios porque "la situación de los cuartelillos es caótica en esos momentos".

Tal disposición de medios sería posible, en opinión del representante sindical, que aseguró que recibió una llamada de teléfono del alcalde previa a anunciarlo públicamente y que no ha habido ninguna reunión al respecto en las últimas semanas, puesto que el ahorro con respecto al modelo mixto actual está cifrado en torno a unos 15 millones de euros.

La decisión del alcalde siguió ayer generando reacciones. El portavoz municipal socialista y candidato a la Alcaldía, Daniel Pérez, aseguró que "este anuncio es una bomba de humo lanzada por el regidor", ya que apuntó que "lo hizo sin haber informado previamente al comité de empresa y actuando sin el más mínimo rigor". A raíz de estos hechos, criticó que el regidor "demostró que es una persona en la que no se puede confiar.

Aún así, reiteró que "creemos en una empresa municipalizada, con la plantilla necesaria para mantener en buen estado las calles de nuestros barrios y distritos y con una maquinaria moderna para poder realizar los trabajos de limpieza", por lo que se congratuló de que "ahora el alcalde se ha sumado a nuestra propuesta".

Por el contrario, el portavoz del grupo municipal socialista en que esta decisión "supone una ruptura con su socio de gobierno, Ciudadanos, a que le prometió para Limasa un modelo híbrido y ahora, nuevamente, ha roto con su palabra". No obstante, a juicio de Pérez, "es fundamental que de una vez por todas se solucione el principal problema que tienen los malagueños, la falta de limpieza, y para eso ya no valen los parches sino que hay que mandar a la oposición al alcalde y a su equipo de gobierno".