Un conductor escapa del atasco con sus dos hijos por los Montes de Málaga: “He tenido suerte; ha llegado al examen"

La odisea que han vivido este miércoles cientos de conductores por el accidente del túnel de Cerrado de Calderón se refleja en el agobio de un padre que no quería que su hijo de 13 años llegará tarde a un examen en el colegio Herrera Oria.

Francisco (nombre supuesto) partió con sus dos hijos de 13 y 16 años desde la vivienda en la que reside hace 40 años en la Cala del Moral. Salió a las 8:05 y ya conocía por la radio el alcance. Pero no suponía la envergadura . “Tiré por abajo del centro comercial y después de 25 minutos parados decidí cruzar la Cala y dirigirme hacia Totalán, Olias, la venta Galvey en los Montes y llegué al colegio en unos 50 minutos”, relata.

El padre dice que eran carreteras de montaña por las que ha circulado y que no estaban tan mal. Eso sí, sus hijos se han mareado algo, pero el menor podrá realizar el examen si es que al final se ha podido celebrar. Una forma distinta de celebrar el Día del Padre.

Como él, numerosos conductores se han visto afectados desde primera hora de la mañana por el siniestro. Otro de ellos es Manolo Pino, un vecino de Iznate, que se ha visto obligado, cuenta a este periódico, a darse la vuelta. "Esto es imposible. Me encontré la retención a las 7. Me he salido ahora, tras dos horas y media parado en caravana y avanzando 10-15 metros durante dos horas. Me he dejado El Palo totalmente cortado", relata.

Otro de los usuarios perjudicados ha sido Pablo Tejada. En su caso, se dirigía a trabajar a Fuengirola cuando comenzaron las retenciones. "Sobre las 7 menos cuarto me pilló el atasco a la altura de El Palo, dirección Málaga y hasta dos horas después no he llegado al túnel. No había quien pasara. He empleado dos horas para hacer dos kilómetros, del 25 al 27", apostilla.

"45 minutos sin avanzar ni un centímetro"

Estefanía ha estado "casi 45 minutos" sin poder "avanzar ni un centímetro" con su vehículo. Trabaja en Teatinos. Su trayecto, que suele hacer en cuestión de 20 minutos, comenzó en la Cala del Moral y, dos horas, después, se encuentra aún en la zona de El Palo. "Hay muchos coches en el arcén, alguno averiado. Otros conductores temen quedarse sin gasolina porque tenían la cantidad justa", afirma. Al tiempo, se cuestiona "por qué se tarda tanto en resolver un accidente".