La apuesta del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) por impulsar la construcción de un hotel junto a la estación Málaga María Zambrano tendrá que esperar. El paso adelante dado por el organismo estatal a finales del pasado mes de julio, cuando activó el concurso para adjudicar la concesión sobre la parcela, ha quedado desierto después de que, cerrado el plazo de presentación de ofertas, no haya una sola empresa que haya formalizado su interés en el espacio.

Así lo han confirmado a este periódico fuentes de Adif, que han precisado que a tenor de los acontecimientos cabe la posibilidad legal de mantener durante un año las condiciones fijadas en el concurso original por si alguna firma opta de manera directa a la concesión. El importe de la licitación asciende a 9.817.474,15 euros (IVA incluido), cantidad que se corresponde con la renta fija mínima garantizada durante el período de vigencia del contrato, establecido en treinta años. 

De acuerdo con los datos conocidos, el hotel proyectado se construirá dentro del actual edificio de la antigua nave de locomotoras, ubicado junto al centro comercial Vialia de la estación María Zambrano, en la calle Mendívil. Este inmueble cuenta con una superficie aproximada de unos 3.000 metros cuadrados. Con esta actuación, Adif pretendía dotar a la estación de la capital de la Costa del Sol de un segundo hotel, al unirse al Barceló ya existente. 

Según el pliego inicial, el futuro adjudicatario asumirá, entre otras obligaciones, la redacción del proyecto básico de ejecución definitivo y proyectos necesarios, cumpliendo los requisitos del hotel establecidos por Adif y asumirá los gastos derivados de las distintas fases del contrato que pudieran serle exigidos por parte de las Administraciones Públicas competentes. 

El contrato distinguiría tres fases. La primera, de desarrollo, abarca desde la firma del contrato de adjudicación, el periodo de elaboración de los proyectos del hotel y la obtención de las autorizaciones y licencias necesarias para el desarrollo del mismo. Esta primera fase no podrá superar los 24 meses desde la fecha de firma del contrato de adjudicación. 

La segunda fase, de construcción, abarca el periodo comprendido desde la finalización de la fase de desarrollo hasta la finalización de las obras de construcción y entrega del hotel a Adif. En ningún caso podrá superar los 24 meses, desde la fecha de finalización de la fase de desarrollo. Y la tercera fase corresponde a la explotación del hotel y abarca el periodo de 30 años a partir de la fecha de firma del contrato de arrendamiento, aunque el inicio de la explotación se produzca de forma parcial. El periodo de 30 años comenzará su vigencia desde la entrega del hotel.

No es la primera ocasión en la que Adif se ve forzado a esperar para poder vender los aprovechamientos de los que dispone en la zona de la estación. Muestra de ello es que tuvo que esperar a noviembre de 2017 para adjudicar una parcela de uso residencial en la calle Poeta Muñoz Rojas tras tres subastas. La operación le permitió en ese momento ingresar 5.840.000 euros, apenas 40.000 euros más que el precio de salida.