Las contrataciones para los taxis se limitarán a una por licencia

En los últimos años, a medida que ha ido bajando el poder adquisitivo de los ciudadanos, los usuarios del taxi también han ido descendiendo y a la vista de todos quedan las largas colas de vehículos que esperan en sus correspondientes paradas para ofrecer su servicio. Para poner fin a esto y regular la oferta y la demanda, aportando viabilidad económica al sector, el consejo rector del Instituto Municipal del Taxi aprueba hoy en su consejo rector una medida que se pondrá en vigor en los próximos meses y que va encaminada a limitar la contratación de asalariados a una sola por licencia. A su vez se favorecerá que los trabajadores por cuenta ajena puedan acceder a tener licencia propia, con créditos en condiciones ventajosas.

En la capital operan en estos momentos un total de 1.432 licencias de taxi. De ellas, alrededor de 600 están concedidas sin permiso para contratar, unas 670 permiten un asalariado y unas 130 que pueden tener contratadas a dos o más personas. Es a estas últimas a donde va dirigida la medida limitando los trabajadores contratados a uno solo, lo que no quiere decir necesariamente que eliminen puestos de trabajo de los 900 asalariados con los que aproximadamente cuenta ahora el sector. Se trata más bien de que no se produzcan nuevas contrataciones, según explicó ayer el concejal de Movilidad, Raúl López, "porque vamos a intentar que se mantengan los puestos de trabajo y no se precarice el servicio", aseguró. A su vez, quiso dejar claro que los taxistas están haciendo ya un esfuerzo congelando las tarifa.

De las 1.432 licencias de la capital 295 están en manos de jubilados o viudas que operan con ellas sin estar dados de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). El reglamento andaluz que regula el sector y que entró en vigor en marzo del pasado año limita su uso en estas condiciones a 15 meses en el caso de los jubilados y a cuatro años para las viudas desde su entrada en vigor. En base a esto, unas 212 licencias (en manos de jubilados) se paralizarán en el mes junio a no ser que antes de esa fecha se transfieran o que el poseedor de la licencia se dé de alta en la Seguridad Social.

Para favorecer que los asalariados tengan preferencia para hacerse con éstas, el concejal comentó ayer que se ha mantenido reuniones con al menos nueve entidades para que ofrezca préstamos con una condiciones que faciliten la venta a la vez que se pondrán en marcha una mesa de trabajo entre los asalariados y los jubilados con licencia. Con esta propuesta se lograría que a largo plazo se realizase "un trasvase" de asalariados a autónomos.

La medida cuanta con el consenso de las tres asociaciones de autónomos del taxi, pero no con la de los asalariados que hoy se posicionará en contra. El presidente de la Asociación Unificada de Autónomos del Taxi, José Antonio Mate, incidió durante la presentación de la medida en el número desproporcionado de asalariados con los que cuenta el sector en la actualidad, lo que hace que esté "por debajo de la rentabilidad". Así explicó que es una medida que lo que busca realmente es adaptarse al reglamento andaluz y la calificó como "muy abierta", ya que "podría haber medidas más drásticas", en cuanto dejen de poder operar las más de 200 licencias ahora en manos de jubilados y por tanto no puedan hacer contrataciones con ellas. Mate concretó que la medida acordada entre las asociaciones de autónomos pasa por tener validez sólo para el año 2013 y que según los resultados que se obtengan se verá si se prorroga.

Por su parte, Arturo Kindelán, de la Confederación General del Trabajo, en representación de los asalariados del taxi, se postuló en contra de la medida y así lo expondrá hoy en el consejo rector al considerar que "el asalariado se queda en la calle", porque la medida "encierra el despido del 50% de los asalariados" y que los ellos "no se sienten representados en ese consejo rector".