El Hospital Pascual ya está listo para abrir en cuanto sea necesario y aportaría casi 200 camas. La Administración sanitaria trabaja en diferentes escenarios y va anticipando recursos por si la pandemia sigue creciendo en la provincia. La previsión es primero agotar las posibilidades de camas en los hospitales públicos y en una segunda fase recurrir a los privados. El tercer escalón será abrir el hospital de campaña en Carranque y como último recurso, la medicalización de hoteles.

De momento, la gestión de la crisis está a caballo entre la primera y la segunda fase. Tras sacar la mayoría de las especialidades al Civil, al Materno y al Hospital del Guadalhorce para ganar espacio para pacientes con coronavirus en el Regional y el Clínico, Salud ha comenzado a utilizar ya los hospitales privados. 

El Regional está sacando sillas de la cafetería en previsión de que este espacio y el salón de actos pueda habilitarse para hospitalización. Pero, además, las áreas de Neurocirugía y Cirugía Cardiovascular, ubicadas en el pabellón B que está sobre las Urgencias, han sido trasladadas a los hospitales CHIP y Vithas Parque San Antonio.

El SAS autoriza la contratación de personal

Otro hospital privado que se abrirá si es necesario es el Pascual. "Está en condiciones de abrirse ya", apuntó una fuente. Aún no hay fecha para esa apertura, pero puede ser inminente. Dependerá de que se saturen el Clínico y el Regional. En previsión de que deba ponerse en uso con celeridad, este centro sanitario privado se fumigará este fin de semana. Además, el SAS ya ha autorizado la contratación de personal. Éste será joven, pero estará tutelado por profesionales veteranos que de forma voluntaria trabajarán en esta crisis. 

La idea es que allí se atienda a los pacientes con coronavirus en la etapa final de su ingreso a fin de descargar al Regional y el Clínico de los casos que ya están muy cerca su su alta.