Denuncian al Defensor del Pueblo la falta de enfermeros en la UCI del Regional de Málaga: "Es insostenible y peligroso"
Salud asegura que han sido los "adecuados" para el verano, reconoce que septiembre comenzó con menos efectivos y aclara que el hospital ya ha realizado "la contratación suficiente"
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El personal de la UCI del Hospital Regional ha remitido un escrito al Defensor del Pueblo y al gerente del centro trasladando la "situación insostenible" que atraviesa este servicio, en el que, aseguran, las enfermeras "afrontan turnos inasumibles y existe una grave falta de personal que compromete tanto la seguridad de los pacientes como la salud física y emocional de los profesionales", según ha dado a conocer públicamente el sindicato Satse.
Por su parte, la Consejería de Salud sostiene que la dotación de efectivos para el plan vacacional en la Unidad de Cuidados Intensivos del centro "ha sido la adecuada a la actividad asistencial en el período estival", si bien, "por circunstancias imprevistas", el mes de septiembre comenzó con menos efectivos, ante lo que el hospital ha realizado la "contratación suficiente para dar la cobertura que permite las garantías de calidad y seguridad".
Sin embargo, las enfermeras insisten en que el número de profesionales no ha sido el adecuado y relatan que a pesar de que "la UCI mantiene cerradas 10 camas por falta de personal", la plantilla actual resulta "claramente insuficiente para garantizar una atención segura", generando una "sobrecarga extrema". "A cada enfermera se le asignan hasta tres pacientes críticos, cuando las recomendaciones científicas establecen que solo deberían atender a uno", ejemplifican.
En el caso de los pacientes con terapia ECMO (aquellos que están conectados a un aparato que hace de pulmón y corazón artificiales), describen que a pesar de requerir "la atención exclusiva y permanente de dos enfermeras por su extrema gravedad están siendo cuidados por una sola profesional que, además, debe responsabilizarse de otros enfermos".
Es por esto que las enfermeras describen un "escenario límite", según sus propios testimonios recogidos por Satse. "Empezamos nuestra jornada laboral llorando y la terminamos llorando. No podemos ejercer la Enfermería como nos hemos formado; lo único que podemos hacer es mantener con vida a nuestros pacientes”, lamenta una profesional del centro. En muchos turnos, añade, "faltan entre cinco y seis enfermeras, a pesar de que la plantilla intenta cubrir las carencias con doblajes voluntarios".
“Durante todo el verano hemos trabajado en condiciones límites, soportando una falta estructural y persistente de profesionales. Lo que comenzó con la ausencia de uno o dos enfermeros por turno se ha convertido en una auténtica emergencia: en las últimas semanas hemos llegado a atender la unidad con un déficit de hasta seis enfermeros menos por turno, en un área que atiende a los pacientes más graves del hospital”, agregan las enfermeras, que llegan a describir la falta de personal como "peligrosa".
Ante esto, Satse ha alertado de que la situación es "crónica e insostenible" y advierte de que la seguridad asistencial "está comprometida". "La falta de recursos obliga a las enfermeras a centrarse solo en lo urgente, descuidando cuidados esenciales como la movilización de pacientes, la prevención de úlceras o el acompañamiento emocional a enfermos y familias".
Además, el sindicato subraya que "el estrés constante, la sobrecarga y la presión emocional están provocando una ola de agotamiento, ansiedad y riesgo de abandono profesional entre las enfermeras de la UCI". Por todo ello, exige a la administración sanitaria y a la gerencia del hospital responsabilidad y soluciones urgentes, recordando que la vida de los pacientes y la salud de los profesionales están en juego.
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