Una detención que parecía una película

Decenas de policías sitiaron Las Delicias durante toda la mañana y mostraron claramente al arrestado

Centenares de vecinos, periodistas, curiosos  y policías llenaron ayer el barrio de Las Delicias.
Centenares de vecinos, periodistas, curiosos y policías llenaron ayer el barrio de Las Delicias.
Ángel Recio Málaga

15 de marzo 2014 - 01:00

El barrio de Las Delicias parecía ayer el escenario de una película de policías, con la salvedad de que todo era real. Más de medio centenar de agentes sitiaron y acordonaron varias de las calles de la barriada, así como el negocio de comida rápida que este matrimonio también posee en La Paz. Muchos de ellos iban con pasamontañas para no ser reconocidos y, junto a numerosos furgones policiales y coches de la secreta, varios perros adiestrados registraron en plena calle, ante la mirada de centenares de vecinos, tanto la furgoneta del detenido como el coche de su esposa.

La operación se inició pasadas las 5:00 en el interior del domicilio de Chafik Jalel Ben Amara Elmedjeri, situado en la calle Cavite, y, apenas unas horas después, fue la comidilla de todo el barrio por el fuerte despliegue policial y porque esta pareja es muy conocida al contar con dos establecimientos de comida rápida en la zona desde hace 20 años. "Es un hombre normal, educado, muy cariñoso y super agradable. La verdad es que tanto él como su mujer Amina son dos bellísimas personas", decía Rosa, una vecina de la barriada.

El registro de la vivienda se prolongó durante varias horas y, mientras tanto, en la calle se agolpaban los medios de comunicación y los residentes. Se pudieron escuchar todo tipo de historias y rumores, si bien la tónica general coincidía con el hecho de que el arrestado era una persona educada y simpática. Varias vecinas comentaron que Chafik Jalel Ben Amara Elmedjeri ya había sido detenido en 2005 por su supuesta participación en un grupo terrorista tras los atentados del 11 de marzo, "pero luego le absolvieron porque no había pruebas". Estas vecinas aseguran que Jalel, como le llaman en la barriada, pasaba en Málaga tres o cuatro meses y el resto del año estaba en Francia, donde se crió y donde vive parte de su familia. "La semana pasada me dijo que se iba a ir otra vez a Francia", relató Rosa. "A mí me contó que iba mucho a Francia porque tiene un negocio en el que hacía paellas al lado de la torre Eiffel", añadió otra señora a su lado.

Según relatan los vecinos, han visto algunas noches a personas hablando con el ahora detenido que iban en vehículos de alta gama, "algo que no es normal en un barrio obrero como éste" y que esta pasada Navidad creen haber observado a un coche blanco, posiblemente policial, haciendo fotos al puesto de shawarma, en el que por cierto también venden pizzas, cuscus o pollo asado haciendo una curiosa mezcla de culturas gastronómicas. Indicaron además que este pasado verano el detenido precisó de una ambulancia al sufrir arritmias.

Pasadas las 12:30, la Policía salió del domicilio con el presunto yihadista y éste estuvo más de media hora en la calle, junto a su furgoneta, por lo que hubo tiempo de sobra para que tanto los medios de comunicación como los curiosos pudieran tomarle todo tipo de imágenes. Acto seguido, fue trasladado andando hacia su local de comida rápida, que está a escasos 50 metros de la vivienda, para registrarlo. Centenares de vecinos siguieron al dispositivo policial y aquello parecía los penitentes de cualquier trono de Semana Santa, generando una imagen un tanto dantesca.

El interés vecinal fue cayendo tras varias horas de espectáculo e incluso muchos residentes mostraban su queja porque no se podía pasar por algunas calles. A las 14:00 concluyó el registro del puesto de shawarma y se dirigieron en coche al otro negocio que tienen en La Paz, donde permanecieron también un largo tiempo hasta que, posteriormente, el detenido fue trasladado a Madrid.

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