Agentes de una unidad de élite de la Guardia Civil, el Grupo de Acción Rápida (GAR) desplegaron este viernes durante toda la tarde en los barrios de Lagunillas y Victoria una operación antiterrorista en la que practicaron dos detenciones de dos hombres, uno de nacionalidad marroquí y otro de Melilla, por orden del Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, según confirmaron fuentes de la investigación a este periódico.

La unidad de élite de la Guardia Civil estuvo desplegada en los principales accesos a la calle Lagunillas y la calle Victoria, que fueron acordonadas, aunque esta última estaba abierta al tráfico y despejada de guardias a las 15:30.

La operativa fue la siguiente: furgones blindados del GAR y otros vehículos irrumpían poco después de las 14:00 en el barrio de Lagunillas desde la Plaza de la Merced y el Jardín de los Monos para ir avanzando poco a poco hasta el objetivo, supuestamente un edificio en ruinas y en el que hace días algunos vecinos habían observado que había movimientos de personas en su interior.

La Guardia Civil pidió el apoyo de la Policía Local para el operativo, pero solo para actuar solo de forma preventiva, según confirmaron fuentes policiales.

Una vez practicada las detenciones, los agentes introdujeron en sus vehículos varias cajas del material que se encontraba en la zona, presuntamente ordenadores y documentación. Poco antes de las 17:00 el dispositivo fue aflojando la presión y liberando algunas calles al tránsito de vecinos. La calle Lagunillas, que había estado totalmente bloqueada, fue despejada sobre las 17:00 al tráfico y al tránsito peatonal, pero el dispositivo continuó hasta última hora de la tarde.

El bloqueo fue tan estricto que algunos vecinos –los que viven más cerca del lugar en el que se concentró el operativo, el mencionado edificio en ruinas– tuvieron que esperar un buen rato para poder entrar en sus casas.

En medios de la investigación se asegura que la operación de Lagunillas forma parte de otra internacional más amplia. En Málaga se estaría investigando si los detenidos guardan relación con algunos detenidos recientemente de una célula de terrorismo yihadista.

Según informaba ayer la cadena Ser, los dos detenidos llevaban residiendo varios meses en Málaga y la Policía ha registrado las viviendas en las que residían, aunque la operación se concentró en el edificio en ruinas de Lagunillas, donde presumiblemente se habrían escondido de las fuerzas del orden. Fuentes cercanas a la operación, además, no descartaban nuevas detenciones al cierre de esta edición.

La operación ha generado mucha incertidumbre y curiosidad en Lagunillas. Desde primera hora de la tarde, decenas de vecinos se apostaban frente al operativo policial. Por el barrio circularon rumores de todo tipo, desde que había un muerto –algo que finalmente no se confirmó– hasta que los detenidos eran una decena o más. Lo cierto es que la presencia de dos furgones para el traslado de presos de la Guardia Civil podía hacer pensar en un número alto de arrestados.

El edificio donde se produjeron las detenciones es bastante conocido por los vecinos por ser un lugar en el que habitualmente se cuelan okupas con distintas motivaciones, desde tener un lugar donde dormir hasta consumir drogas. El año pasado sufrió un incendio que asustó mucho a los vecinos por su posible propagación. Varios de ellos confirman que en los últimos días habían visto movimiento en el interior del edificio, algo que fue comentado en el grupo de Whatsapp que comparten los residentes del barrio.