La Diócesis de Málaga sube su presupuesto hasta los 36 millones y atiende a 51.000 personas
El obispo hace especial hincapié en el problema de la vivienda
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La Diócesis de Málaga, con motivo del Día de la Iglesia Diocesana conmemorado este 9 de noviembre, ha desgranado su presupuesto de 2024 con un capítulo de ingresos y gastos que rondó el año pasado los 36 millones de euros, en gran parte, debido a la rehabilitación del techo de la Catedral de Málaga, pero también a la contribución del turismo que la visita, que ha impactado "prácticamente en el 50 %" de los ingresos del monumento. Además, respecto al desglose de esta partida, destaca el aumento de personas necesitadas o en situación de vulnerabilidad con un total de 51.929 personas atendidas por la institución.
Las cifras del pasado año, presentadas por el delegado episcopal para Asuntos Económicos, Rafael Carmona, junto al obispo de Málaga, José Antonio Satué, han contemplado "una gestión prudente y eficaz" desde un incremento total de en torno al 33 %, que viene repartido por ingresos turísticos provinientes de la Catedral de Málaga que "se han multiplicado", sumado a una mayor recogida de subvenciones de administraciones públicas y a actuaciones con el fondo común interdiocesano del que "se ha repartido un remanente de un millón y medio de euros", que se contrarrestan con el impacto de los gastos por las obras en el mismo monumento.
"Esta diócesis asume su convicción. Laico, religioso, sacerdote y el obispo están comprometidos en el mismo camino escuchando la voz de Dios y del pueblo. La iglesia somos todos y compartimos la misión de anunciar y administrar con fidelidad lo que el señor nos confía", ha apuntado el delegado episcopal.
Informe de ingresos y gastos
Con ello, según ha descrito Carmona, los ingresos ordinarios se desglosan en: aportaciones directas de los fieles con 8.170.000 euros (22,77 %); la asignación tributaria (fondo común) con un aumento por "las X de la casilla de la renta" y asciende a 6.137.000 euros(16,95 %); ingresos de patrimonio y otras actividades (alquileres de inmuebles, ingresos financieros, etc.), siendo estos los mayoritarios con hasta 11.695.000 euros (32,30 %); otros ingresos corrientes (servicios, subveciones, etc.), en 9.234.000 euros (25,50 %); e ingresos extraordinarios, cifrados en 968.512.
Por su parte, en cuanto a los gastos, según ha aclarado la institución eclesial, provienen esencialmente de: acciones pastorales y asistenciales que supusieron 7.130.205 euros en 2024, entre ellas la atención a personas vulnerables y en riesgo de exclusión social; retribución del clero en 3.947.000 euros (10,9 %); retribución del personal seglar, 4.665.774,89 euros (12,89 %); conservación de edificios y gastos de funcionamiento, que se llevan hasta 15.993.522,44; gastos extraordinarios (construcciones, programas de rehabilitación, etc.) en 2.662.067(7,35 %); y de capacidad de financiación de 1.806.996,10 euros (4,99 %)
Así, respecto a este ejercicio, Carmona ha resaltado el importante impacto de las obras del techo de la Catedral de Málaga que, según ha destacado el representante de la Diócesis malagueña, suponen "alrededor de 22 millones de euros". Hasta el momento, dijo, "se pueden cubrir catorce millones de ellos y faltarían nueve millones más para cuando llegue el momento", no solo para el tejado, sino también contemplando el interior del templo, donde "siembre hay cosas que hacer".
A esto, le añade otras obras de restauración también para atender a la Iglesia del Sagrario para la que "tenemos que buscar recursos" y la Iglesia de Santo Domingo que necesita "adecentar la fachada". Unidas a varios proyectos también en Melilla, especialmente en la Iglesia Santa María Micaela a la que le han destinado "820.000 euros" y la Iglesia de La Purísima con una inversión de "728.000 euros".
Todo enmarcado, a su vez, en una deuda que la Diócesis de Málaga estima en 18 millones de euros y a la que aseguran pueden "hacer frente". Según aseguraron, se ha consolidado, entre otras causas, por rehabilitaciones de otras parroquias, para las que anteriormente se han "pedido préstamos" pero que ya se están abordando.
Necesitados, también por la vivienda
En relación a su acción social la Iglesia, desde su sede de Málaga, ha alcanzado a atender a más de 51.000 personas en 209 centros, la mayoría de ellos destinados a mitigar la pobreza con hasta 43.753 afectados por en esta situación, contando con la implicación directa de Cáritas y Manos Unidas, que se implican con este colectivo vulnerable.
En este contexto, el obispo Satué ha hecho especial hincapié en "el problema de la vivienda" que atrae a numerosas personas a pedir ayudas en las parroquias: "A veces es difícil encontrar viviendas de alquiler que cuesten menos que un salario mínimo, no solamente viene gente desempleada, también los hay con empleo pero no hay forma de llegar a fin de mes y la institución, además de ofrecer pisos desde Cáritas a personas y familias vulnerables, atiende a los que ya han sido deshauciadas en el Cotolengo y hacen la labor de denunciar esta situación", ha incidido.
Dentro de esta actividad caritativa y asistencial, la Diócesis cuenta, asimismo, con 14 casas para acianos, enfermos y personas con discapacidad; tres centros de asistencia a emigrantes, refugiados y prófugos; cuatro centros de menores y jóvenes y de tutela de la infancia; un centro de rehabilitación para drogodependientes; uno para la defensa de la vida y la familia; cinco centros para la promoción de la mujer y para víctimas de violencia; y un centro para promover el trabajo. Todo ello, bajo la atención de 1.366 volutarios de Cáritas, 94 de Manos Unidas y 29 proyectos de cooperación al desarrollo en el mundo.
"Nuestro recordado Papa Francisco nos decía que la solidaridad no es un mero eslogan. Esta diócesis está comprometida en los mismos caminos y la voz del pueblo de Dios. Para muchos la única esperanza que tienen es llamar al corazón de la Iglesia", destaca, por su parte, Carmona.
La Iglesia Pastoral y Educativa
En cuanto a su posición pastoral, la Diócesis de Málaga, destaca por sus 250 parroquias en las que se reparten 300 sacerdotes, casi 700 religiosos y religiosas, 143 monjas, más de 4.500 catequistas, que se añaden a los seminaristas y diáconos. Así también, dentro de su actividad educativa cuentan con 30 centros concertados, 7.860 alumnos, 207 trabajadores en los centros, y casi 700 de personal docente en los centros de la Fundación Victoria; y 45 centros católicos concertados, con 29.000 alumnos, casi 6.000 trabajadores y más de 1.600 de personal docente en estos centros.
Con ello, también insisten en su acción misionera con 171 misioneros; de patrimonio cultural (60 bienes inmuebles de interés cultural y 51 proyectos de construcción y rehabilitación); de actividad celebrativa, con casi 5.000 bautizos, más de 8.000 confirmaciones, alrededor de 5.000 primeras comuniones y 957 matrimonios; y cultural con nueve fiestas religiosas de interés turístico autonómico, nacional e internacional.
"Es motivo de esperanza el crecimiento. La misión evangelizadora se renueva cada día de quienes sirven en los barrios, colegios y comunidades, educar es sembrar futuro y es una forma integral basada en valores y en Fe y el patrimonio de la Iglesia es un tesoso que custodia la fe, espacios donde Dios se hace presente, en malagueños y melilleses. No son meramente cifras, son rostros, nombres e historias", ha concluido.
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