El sector hostelero está atravesando por uno de sus peores momentos, sobre todo en el centro de Málaga donde pagan alquileres astronómicos por los locales y no hay suficientes clientes por el coronavirus, poniendo así en peligro su viabilidad. La mejor solución es hallar una vacuna o un tratamiento que acabe con el Covid-19 y todo vuelva a la normalidad pero, mientras tanto, hay que aguantar como se pueda. En este contexto, la Diputación de Málaga va a conceder subvenciones en régimen de concurrencia no competitiva para las empresas del sector de la restauración, cafeterías y catering que estén en la provincia de Málaga por un importe máximo por proyecto de 6.000 euros.

El organismo municipal publicó las bases reguladoras en el Boletín Oficial de la Provincia de Málaga el pasado jueves, 10 de septiembre, y, según apuntan desde esta entidad pública, la convocatoria como tal saldrá publicada en un plazo de unas dos semanas.

Hay dos tipos de subvenciones. Una es, señalan, “para la adquisición de bienes de inversión para frenar la transmisión del Covid-19 y para el crecimiento empresarial”. En este sentido, las bases reguladoras explican que se financiará la instalación de mamparas protectoras, de sistemas de control de aforo (hardware y software), de sistemas de control de temperatura, de taquillas para guardar la ropa de trabajo o la compra de equipos de desinfección.

Dará dinero para comprar motos y bicicletas para hacer servicio a domicilio

Además de ese dinero para medidas de protección puras y duras, la Diputación anuncia que habrá también dinero para que las empresas puedan reinventarse a la hora de captar clientes. Financiarán, dicen, “estrategias de crecimiento empresarial, consistentes en desarrollar nuevas cuotas de mercado e introducir nuevos servicios o modificar los servicios ya existentes, que permita a la empresa ser flexible y creativa para adaptarse a los cambios de mercado actual provocado por la pandemia del Covid-19”. Dentro de eso, se especifica que se subvencionarán la compra de software para la transformación digital –como plataformas de venta on line, herramientas web o técnicas relacionadas con el big data–, equipos informáticos, teléfonos móviles, tabletas, motocicletas, bicicletas, ciclomotores o equipamiento que permita la preparación, envasado y transporte para servicios a domicilio.

Por otra parte, hay una segunda línea de subvenciones que financia el alquiler de los locales, el suministro de agua, luz y gas, los gastos de teléfono o mensajería. También incluye la adquisición de equipos de protección contra el coronavirus (mascarillas, guantes, gafas, ropa, geles, productos de limpieza) e incluso la realización de pruebas PCR y de test serológicos. En esta segunda línea hay otro apartado para el crecimiento empresarial y se subraya que habrá dinero para gastos relacionados con la consultoría, servicios en la nube, comercio electrónico, servicio a domicilio, publicidad, adquisición de vinilos y adhesivos sobre medidas anti Covid o para cursos de formación sobre prevención ante el virus.

La Diputación deja claro en las bases reguladoras que este dinero no se abonará para pagar salarios, intereses bancarios, impuestos o procedimientos judiciales, así como inversiones en obras de inmuebles.