Entre drones y patrullas caninas

Aparecen en numerosas cartas de deseos, no sólo de niños sino también de adultos, dirigidas a sus Majestades de Oriente. Oscilan entre los 20 y los 150 euros, aunque otros pueden alcanzar las cuatro cifras. Los drones han pasado de ser armas letales creadas para la guerra a juguetes que vuelan, graban, hacen fotografías y acrobacias en el aire. De tierra, de aire, con forma de helicóptero o terrestres. "Nos han traído cinco modelos distintos, que son los que más se están vendiendo. Se recomiendan para mayores de 14 años, pero estos vienen más protegidos", explica una de las comerciantes de El Corte Inglés. Entre los más populares destaca uno denominado Skywalker, que rueda por suelos, paredes y techos. "Permite a los padres iniciar a los hijos en los drones antes de la edad recomendada", precisa.

Otros traen incorporada una cámara (nano drones) para captar imágenes y están dirigidos, destaca esta trabajadora, para niños de 3 años. El más grande y puntero conecta más con los adultos, especialmente aquellos a los que les gusta "volar en el campo y hacer fotografías". Son también los más caros.

Pero en líneas generales hay mucho "desconocimiento" sobre el uso de los drones. "Se venden como juguetes pero no lo son. No pueden volar en parques o playas. Es importante que la gente sepa que se trata de aeronaves", recalca la vendedora. En la mayoría de los casos funcionan gracias a una batería de litio, similar a la que llevan los móviles. El inconveniente que, en este sentido, aprecian algunos compradores estriba en la autonomía de vuelo. Unos 8 minutos en el caso de los más pequeños y de 15 en el dron de los grandes.

En palabras de varios comerciantes, los Reyes vendrán el próximo 6 de enero "muy tecnológicos". Desde muñecas con las que poder hablar y que ofrecen interacción cada vez más real hasta bolígrafos que pintan creaciones en 3D. Otra de las opciones son los robots con forma de dinosaurios o seres humanos.

La lista de los más buscados se compone además de las pistolas Nerf, muy de moda estas Navidades. "Tienen balas de goma espuma. Su uso se recomienda a partir de los 8 años, pero la gente las compra para cualquier edad. Los niños quedan con los amigos y hacen batallas", afirma otra vendedora. El mecanismo es sencillo, aunque existen varios modelos, inspirados en la serie The Walking Death para aprovechar su impacto en televisión. Y para aportar aún más credibilidad si cabe, las tiendas ofrecen también numerosos accesorios. Desde cinturones para recargar balas hasta gafas de protección para protegerse de los ataques.

También los muñecos de la serie de dibujos animados La Patrulla Canina (Paw Patrol) figuran este año entre los juguetes más demandados. Otro de los éxitos ha sido el que ha cosechado la película Star Wars, que ha generado, según los comerciantes consultados, "muchísimo impacto". Así, no es de extrañar que sean varias las tiendas en las que los dueños han optado por dedicar un espacio a los artículos vinculados a la tradicional saga.

En la lista de regalos encargados a los Reyes figuran además las muñecas de Frozen, que vuelven a destacar entre las más vendidas, especialmente Elsa Purpurina.

Tampoco faltan los juguetes educativos, los superhéroes de Marvel o los divertidos Minions. Sus Majestades de Oriente volverán a cargar en sus renos y camellos productos de Peppa Pig y Las Barriguitas. Aunque en menor medida, los Nenucos, la Barbie o los juegos de construcción también estarán bajo el árbol de Navidad la noche del 5 de enero, la más mágica del año.

El 112 pide verificar la seguridad en fiestas y cotillones

El servicio de Emergencias 112 Andalucía, dependiente de la Consejería de Justicia e Interior de la Junta, aconseja a la ciudadanía informarse de las medidas de seguridad, evacuación y autoprotección para garantizar la seguridad en las fiestas y cotillones que se organizan con motivo de la celebración del Fin de Año. El Teléfono Único de Emergencias de la Junta, dentro de su campaña de prevención y divulgación #Navidad112, recomienda medidas previas antes de la celebración del evento, como son informarse de las medidas de seguridad y protección que ofrece la organización del evento así como del aforo permitido. Una vez que se llegue al recinto, se deben localizar las salidas de emergencia y comprobar que no están cerradas con candados o que existan elementos que las obstaculicen.