Unos 6.000 trabajadores del sector de la automoción de la provincia de Málaga están convocados a una huelga por los sindicatos CCOO y UGT los días 30 de diciembre y 5 de enero, llamamiento respaldado en asamblea general por la mayoría de la plantilla.

Estas protestas responden a la congelación de los salarios de este año propuesta por los empresarios, que -según las centrales- supone una pérdida de poder adquisitivo del 6,8%, según el Índice de Precios al Consumo (IPC) de noviembre (unos 90 euros mensuales para un salario medio de convenio de 1.350 euros netos).

La patronal con la suspensión de una reunión que estaba prevista trata de "atrasar la negociación" para mediados de enero de 2023, indican las organizaciones sindicales.

La patronal propuso en reuniones anteriores ajustar la jornada laboral máxima del convenio a las horas efectivas de trabajo, con lo que -a juicio de las fuentes- pretende eliminar el exceso de jornada y elevarla así entre 16 y 32 horas anuales.

Las empresas también quieren introducir en el sector los contratos fijos discontinuos a tiempo completo y parcial, lo que para los sindicatos significa comenzar a sustituir personas con contrato a tiempo completo y pasarles a parcial y discontinuo.

Otra de las propuestas que no aceptan las organizaciones sindicales es que la patronal quiere negociar una nueva cláusula de descuelgue salarial para no aplicar las subidas pactadas en convenio en las empresas a voluntad del empresario.

Estos 6.000 afectados pertenecen a 2.300 centros de trabajo de unas 1.400 empresas.

Las ventas de coches aumentan

El sector automovilístico se está recuperando de la pandemia. Actualmente, las matriculaciones de vehículos van creciendo poco a poco, siendo superiores a las de 2021, pero sin acercarse a las alcanzadas antes de la crisis del Covid. Entre enero y noviembre de este año se han vendido casi 20.300 vehículos y solo en noviembre fueron 1.992.